A todo el pueblo que había quedado de los Amorreos, Hititas, Ferezeos, Heveos y Jebuseos, que no eran de los Israelitas,
(1 Reyes 9:20)es decir, a sus descendientes que habían quedado en la tierra después de ellos, a quienes los Israelitas no habían podido destruir completamente, Salomón les impuso leva de trabajo forzado hasta el día de hoy.
(1 Reyes 9:21)Pero de los Israelitas Salomón no hizo esclavos, porque ellos eran los hombres de guerra, sus servidores, sus príncipes, sus capitanes, los comandantes de sus carros y sus hombres de a caballo.
(1 Reyes 9:22)Estos eran los oficiales que estaban al frente de la obra de Salomón: 550 los cuales supervisaban al pueblo que hacía la obra.
Tan pronto como la hija de Faraón subió de la ciudad de David a la casa que Salomón le había construido, entonces edificó el Milo (la fortaleza).
(1 Reyes 9:24)Tres veces al año Salomón ofrecía holocaustos y ofrendas de paz sobre el altar que él había edificado al SEÑOR, quemando incienso al mismo tiempo sobre el altar que estaba delante del SEÑOR después que terminó la casa.
(1 Reyes 9:25)El rey Salomón también construyó una flota en Ezión Geber, que está cerca de Elot, en la ribera del Mar Rojo, en la tierra de Edom.
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1 Reyes 9:23 - Referencia Cruzada
además de los 3,300 oficiales de Salomón que estaban al frente de la obra y que gobernaban la gente que hacía el trabajo.
(1 Reyes 5:16)Estos eran los principales oficiales del rey Salomón: 250 que gobernaban sobre el pueblo.
(2 Crónicas 8:10)Puso 70,000 de ellos a llevar cargas, 80,000 a labrar piedras en los montes y 3,600 como capataces para hacer trabajar al pueblo.
(2 Crónicas 2:18)