Pero Jacob le respondió: "Tú sabes cómo te he servido, y cómo le ha ido a tu ganado conmigo.
(Génesis 30:29)Porque tenías poco antes de que yo viniera, y ha aumentado hasta ser multitud. El SEÑOR te ha bendecido en todo lo que he hecho. Y ahora, ¿cuándo proveeré yo también para mi propia casa?"
(Génesis 30:30)¿Qué te daré?" preguntó Labán. "No me des nada," respondió Jacob. "Volveré a pastorear y a cuidar tu rebaño si tan sólo haces esto por mí:
(Génesis 30:31)déjame pasar por entre todo tu rebaño hoy, apartando de él toda oveja moteada o manchada y todos los corderos negros, y las manchadas o moteadas de entre las cabras, y ése será mi salario.
Mi honradez (justicia) responderá por mí el día de mañana, cuando vengas a ver acerca de mi salario. Todo lo que no sea moteado y manchado entre las cabras, y negro entre los corderos, si es hallado conmigo, se considerará robado."
(Génesis 30:33)Y Labán dijo: "Muy bien, sea conforme a tu palabra."
(Génesis 30:34)Aquel mismo día apartó Labán los machos cabríos rayados o manchados y todas las cabras moteadas o manchadas, y todo lo que tenía algo de blanco, y de entre los corderos todos los negros, y lo puso todo al cuidado de sus hijos.
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Génesis 30:32 - Referencia Cruzada
Si él decía: 'Las moteadas serán tu salario,' entonces todo el rebaño paría moteadas; y si decía: 'Las rayadas serán tu salario,' entonces todo el rebaño paría rayadas.
(Génesis 31:8)Y sucedió que por el tiempo cuando el rebaño estaba en celo, alcé los ojos y vi en sueños que los machos cabríos que cubrían las hembras eran rayados, moteados y abigarrados.
(Génesis 31:10)Aquel mismo día apartó Labán los machos cabríos rayados o manchados y todas las cabras moteadas o manchadas, y todo lo que tenía algo de blanco, y de entre los corderos todos los negros, y lo puso todo al cuidado de sus hijos.
(Génesis 30:35)