Levántate, ve a Padán Aram, a casa de Betuel, padre de tu madre; y toma de allí mujer de entre las hijas de Labán, hermano de tu madre.
(Génesis 28:2)El Dios Todopoderoso te bendiga, te haga fecundo y te multiplique, para que llegues a ser multitud de pueblos.
(Génesis 28:3)Que también te dé la bendición de Abraham, a ti y a tu descendencia contigo, para que tomes posesión de la tierra de tus peregrinaciones, la que Dios dio a Abraham."
(Génesis 28:4)Entonces Isaac despidió a Jacob, y éste fue a Padán Aram, a casa de Labán, hijo de Betuel el Arameo, hermano de Rebeca, madre de Jacob y Esaú.
Esaú vio que Isaac había bendecido a Jacob y lo había enviado a Padán Aram para tomar allí mujer para sí, y que cuando lo bendijo, le dio órdenes, diciendo: "No tomarás para ti mujer de entre las hijas de Canaán."
(Génesis 28:6)También supo que Jacob había obedecido a su padre y a su madre, y se había ido a Padán Aram.
(Génesis 28:7)Vio, pues, Esaú que las hijas de Canaán no eran del agrado de su padre Isaac;
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Génesis 28:5 - Referencia Cruzada