Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces envié a Moisés y a Aarón, y herí con plagas a Egipto conforme a lo que hice en medio de él. Después los saqué a ustedes. (Josué 24:5)
Saqué a sus padres de Egipto y llegaron al mar, y Egipto persiguió a sus padres con carros y caballería hasta el Mar Rojo. (Josué 24:6)
Pero cuando clamaron al SEÑOR, El puso tinieblas entre ustedes y los Egipcios, e hizo venir sobre ellos el mar, que los cubrió. Sus propios ojos vieron lo que hice en Egipto. Y por mucho tiempo ustedes vivieron en el desierto. (Josué 24:7)
Entonces los traje a la tierra de los Amorreos que habitaban al otro lado del Jordán, y ellos pelearon contra ustedes. Los entregué en sus manos, y tomaron posesión de su tierra cuando Yo los destruí delante de ustedes.
Después Balac, hijo de Zipor, rey de Moab, se levantó y peleó contra Israel, y envió a llamar a Balaam, hijo de Beor, para que los maldijera. (Josué 24:9)
Pero Yo no quise escuchar a Balaam; y él tuvo que bendecirlos a ustedes, y los libré de su mano. (Josué 24:10)
Ustedes pasaron el Jordán y llegaron a Jericó. Los habitantes de Jericó pelearon contra ustedes, y también los Amorreos, los Ferezeos, los Cananeos, los Hititas, los Gergeseos, los Heveos y los Jebuseos, pero yo los entregué en sus manos. (Josué 24:11)

Otras publicaciones relacionadas con "Josué 24:8":

Samuel Acevedo
No temas, ni desmayes
En este artículo, Samuel Acevedo nos recuerda la importancia de no temer ni desmayar en nuestra vida cristiana y cómo mantener una relación viva con Dios para encontrar paz y bendición en Él.


Dr. Roberto Miranda
Buena semilla, pero mala tierra
El Capítulo 13 de Números relata la historia de los hebreos que se preparan para entrar en la Tierra Prometida, pero la primera generación de hebreos no pudo entrar debido a su incredulidad y falta de fe. Solo Caleb y Josué, quienes le creyeron a Dios, alcanzaron la bendición. Este artículo nos exhorta a convertirnos en tierra fértil para recibir las semillas de bendición que Dios quiere plantar en nosotros.


Josué 24:8 - Referencia Cruzada

Al que hirió a grandes reyes, Porque para siempre es Su misericordia; (Salmos 136:17)
todas las ciudades de Sehón, rey de los Amorreos, que reinaba en Hesbón, hasta la frontera de los Amonitas. (Josué 13:10)
Entonces Israel envió mensajeros a Sehón, rey de los Amorreos, diciéndole: (Números 21:21)
Hirió a muchas naciones Y mató a reyes poderosos; (Salmos 135:10)
Entonces Sehón salió con todo su pueblo a encontrarnos en batalla en Jahaza. (Deuteronomio 2:32)
También les diste reinos y pueblos, Y se los repartiste con sus límites. Tomaron posesión de la tierra de Sehón, rey de Hesbón, Y la tierra de Og, rey de Basán. (Nehemías 9:22)