Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces subió Josué, y todo Israel con él, de Eglón a Hebrón, y pelearon contra ella. (Josué 10:36)
La conquistaron y la hirieron a filo de espada, con su rey, todas sus ciudades y todas las personas que había en ella. No dejaron ningún sobreviviente, conforme a todo lo que había hecho a Eglón. La destruyeron por completo con todas las personas que había en ella. (Josué 10:37)
Después Josué, y todo Israel con él, se volvieron contra Debir y peleó contra ella. (Josué 10:38)
La conquistaron, con su rey y todas sus ciudades, hiriéndolas a filo de espada. Destruyeron por completo a todas las personas que había en ella. Josué no dejó sobreviviente alguno. Como había hecho con Hebrón, y como había hecho también con Libna y su rey, así hizo con Debir y su rey.
Hirió, pues, Josué toda la tierra: la región montañosa, el Neguev (región del sur), las tierras bajas (la Sefela) y las laderas, y a todos sus reyes. No dejó ningún sobreviviente, sino que destruyó por completo a todo el que tenía vida, tal como el SEÑOR, Dios de Israel, había mandado. (Josué 10:40)
Josué los hirió desde Cades Barnea hasta Gaza, y todo el territorio de Gosén hasta Gabaón. (Josué 10:41)
A todos estos reyes y sus territorios los capturó Josué de una vez, porque el SEÑOR, Dios de Israel, combatía por Israel. (Josué 10:42)

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Josué 10:39 - Referencia Cruzada

Y el SEÑOR los entregó en manos de Israel, los derrotaron y los persiguieron hasta Sidón la grande, hasta Misrefot Maim y hasta el Valle de Mizpa al oriente. Los hirieron hasta que no les quedó sobreviviente alguno. (Josué 11:8)
Jehú mató a todos los que quedaban de la casa de Acab en Jezreel, y a todos sus grandes, a sus amigos íntimos y a sus sacerdotes, hasta que no le dejó ningún sobreviviente. (2 Reyes 10:11)
Así que el SEÑOR nuestro Dios también entregó en nuestra mano a Og, rey de Basán, con todo su pueblo, y los herimos hasta que no quedaron sobrevivientes. (Deuteronomio 3:3)
Entonces Horam, rey de Gezer, subió en ayuda de Laquis, pero Josué lo derrotó a él y a su pueblo, hasta no dejar sobreviviente alguno. (Josué 10:33)
La conquistaron y la hirieron a filo de espada, con su rey, todas sus ciudades y todas las personas que había en ella. No dejaron ningún sobreviviente, conforme a todo lo que había hecho a Eglón. La destruyeron por completo con todas las personas que había en ella. (Josué 10:37)
Hirió, pues, Josué toda la tierra: la región montañosa, el Neguev (región del sur), las tierras bajas (la Sefela) y las laderas, y a todos sus reyes. No dejó ningún sobreviviente, sino que destruyó por completo a todo el que tenía vida, tal como el SEÑOR, Dios de Israel, había mandado. (Josué 10:40)
Entonces la casa de Jacob será un fuego, Y la casa de José una llama, Y hojarasca la casa de Esaú. Los quemarán y los consumirán, Y no quedará sobreviviente alguno de la casa de Esaú," Porque el SEÑOR ha hablado. (Abdías 1:18)