Nueva Biblia Latinoamericana
No ararás con buey y asno juntos. (Deuteronomio 22:10)
No vestirás ropa de material mezclado de lana y lino. (Deuteronomio 22:11)
Te harás borlas en las cuatro puntas del manto con que te cubras. (Deuteronomio 22:12)
Si un hombre toma a una mujer y se llega a ella, y después la aborrece,
y la acusa de actos vergonzosos y la denuncia públicamente y dice: 'Tomé a esta mujer, pero al llegarme a ella no la encontré virgen,' (Deuteronomio 22:14)
entonces el padre y la madre de la joven tomarán las pruebas de la virginidad de la joven y las llevarán a los ancianos de la ciudad, a la puerta. (Deuteronomio 22:15)
Y el padre de la joven dirá a los ancianos: 'Yo di mi hija por mujer a este hombre, pero él la aborreció; (Deuteronomio 22:16)

Otras publicaciones relacionadas con "Deuteronomio 22:13":

Dr. Roberto Miranda
Una oportunidad desperdiciada
Este sermón habla sobre cómo reaccionamos ante las ofensas y conflictos en nuestras vidas, y la importancia de vivir conforme a los principios del Reino de Dios. Se utiliza la historia de Dina en Génesis para ilustrar cómo los hijos de Dios deben poner por encima los valores del Reino de Dios, como la paz, la misericordia y el perdón.


Milagros García Klibansky
Un velo en el corazón
En este artículo, Milagros García Klibansky nos habla sobre la importancia de no dar más importancia al aspecto externo que a lo que guarda nuestro corazón en nuestra relación con Dios. También nos exhorta a respetar las decisiones personales de cada hermano en la fe y a no ser piedras de tropiezo ni poner cargas pesadas en los débiles en la fe.


Deuteronomio 22:13 - Referencia Cruzada

Así deben también los maridos amar a sus mujeres, como a sus propios cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama. (Efesios 5:28)
Después de algún tiempo, en los días de la siega del trigo, sucedió que Sansón fue a visitar a su mujer con un cabrito, y dijo: "Llegaré a mi mujer en su recámara." Pero el padre de ella no lo dejó entrar. (Jueces 15:1)
Cuando alguien toma una mujer y se casa con ella, si sucede que no le es agradable porque ha encontrado algo reprochable en ella, y le escribe certificado de divorcio, lo pone en su mano y la despide de su casa, (Deuteronomio 24:1)
Vio el SEÑOR que Lea era aborrecida, y le concedió hijos. Pero Raquel era estéril. (Génesis 29:31)
Entonces Jacob dijo a Labán: "Dame mi mujer, porque mi tiempo se ha cumplido para unirme a ella." (Génesis 29:21)
Y al anochecer tomó a su hija Lea y se la trajo, y Jacob se llegó a ella. (Génesis 29:23)