Le darás las primicias de tu grano, de tu vino nuevo, de tu aceite y del primer esquileo (corte de lana) de tus ovejas.
(Deuteronomio 18:4)Porque el SEÑOR tu Dios lo ha escogido, a él y a sus hijos de entre todas tus tribus, para que esté allí y sirva en el nombre del SEÑOR, para siempre.
(Deuteronomio 18:5)Y si un Levita sale de alguna de tus ciudades, de cualquier parte de Israel en que resida, y llega con todo el deseo de su alma al lugar que el SEÑOR escoja,
(Deuteronomio 18:6)él ministrará en el nombre del SEÑOR su Dios, como todos sus hermanos Levitas que están allí delante del SEÑOR.
Comerán porciones iguales, excepto lo que reciban de la venta de sus patrimonios.
(Deuteronomio 18:8)Cuando entres en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da, no aprenderás a hacer las cosas abominables de esas naciones.
(Deuteronomio 18:9)No sea hallado en ti nadie que haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni hechicería, o que sea agorero, o hechicero,
(Deuteronomio 18:10)Otras publicaciones relacionadas con "Deuteronomio 18:7":
Deuteronomio 18:7 - Referencia Cruzada
Ezequías designó las clases de los sacerdotes y de los Levitas, cada uno en su clase, según su servicio, tanto sacerdotes como Levitas, para los holocaustos y para las ofrendas de paz, para que ministraran, dieran gracias y alabaran en las puertas del campamento del SEÑOR.
(2 Crónicas 31:2)