En el principio Dios creó los cielos y la tierra.
(Génesis 1:1)
La tierra estaba sin orden y vacía, y las tinieblas cubrían la superficie del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la superficie de las aguas.
(Génesis 1:2)
Entonces dijo Dios: "Sea la luz." Y hubo luz.
(Génesis 1:3)
Dios vio que la luz era buena; y Dios separó la luz de las tinieblas.
Y Dios llamó a la luz día y a las tinieblas llamó noche. Y fue la tarde y fue la mañana: un día.
(Génesis 1:5)
Entonces dijo Dios: "Haya expansión (firmamento) en medio de las aguas, y separe las aguas de las aguas."
(Génesis 1:6)
Dios hizo la expansión (el firmamento), y separó las aguas que estaban debajo de la expansión de las aguas que estaban sobre la expansión. Y así fue.
(Génesis 1:7)
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Génesis 1:4 - Referencia Cruzada
Dios hizo las bestias de la tierra según su especie, y el ganado según su especie, y todo lo que se arrastra sobre la tierra según su especie. Y Dios vio que era bueno.
(Génesis 1:25)
Y produjo la tierra vegetación: hierbas que dan semilla según su especie, y árboles que dan su fruto con semilla, según su especie. Y Dios vio que era bueno.
(Génesis 1:12)
Dios vio todo lo que había hecho; y era bueno en gran manera. Y fue la tarde y fue la mañana: el sexto día.
(Génesis 1:31)
Dios llamó a lo seco "tierra," y al conjunto de las aguas llamó "mares." Y Dios vio que era bueno.
(Génesis 1:10)
Y yo vi que la sabiduría sobrepasa a la insensatez, como la luz a las tinieblas.
(Eclesiastés 2:13)
y para dominar el día y la noche, y para separar la luz de las tinieblas. Y Dios vio que era bueno.
(Génesis 1:18)
Agradable es la luz, Y bueno para los ojos ver el sol.
(Eclesiastés 11:7)