Nueva Biblia Latinoamericana
El quinto ángel derramó su copa sobre el trono de la bestia, y su reino se quedó en tinieblas; y todos se mordían la lengua de dolor. (Apocalipsis 16:10)
Blasfemaron contra el Dios del cielo por causa de sus dolores y de sus llagas, y no se arrepintieron de sus obras. (Apocalipsis 16:11)
El sexto ángel derramó su copa sobre el gran Río Eufrates; y sus aguas se secaron para que fuera preparado el camino para los reyes del oriente. (Apocalipsis 16:12)
Y vi salir de la boca del dragón, de la boca de la bestia, y de la boca del falso profeta, a tres espíritus inmundos semejantes a ranas.
Pues son espíritus de demonios que hacen señales, los cuales van a los reyes de todo el mundo, a reunirlos para la batalla del gran día del Dios Todopoderoso. (Apocalipsis 16:14)
¡Estén alerta! Vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela y guarda sus ropas, no sea que ande desnudo y vean su vergüenza." (Apocalipsis 16:15)
Entonces los reunieron en el lugar que en Hebreo se llama Armagedón. (Apocalipsis 16:16)

Otras publicaciones relacionadas con "Apocalipsis 16:13":

Dr. Roberto Miranda
Guerra espiritual
En este artículo se habla sobre la guerra espiritual y la importancia de mantenerse sobrios y vigilantes en la vida espiritual. Se enfatiza la necesidad de conocer los principios de la palabra de Dios para poder defenderse del enemigo y mantenerse fuertes en la fe. También se menciona la importancia de resistir al enemigo y no dejar que entre en la vida, y cómo el poder de Dios está en nosotros para contrarrestar el poder del diablo.


Lilian Gutierrez
Cierra la sombrilla - la lluvia tardía se aproxima
En este sermón, la predicadora habla sobre la lluvia tardía que Dios enviará para preparar a su pueblo y traer prosperidad y gozo. También se habla sobre la presencia de Dios, la restauración, la lucha contra el enemigo y la promesa del derramamiento del Espíritu Santo con aún más poder.


Apocalipsis 16:13 - Referencia Cruzada

Amados, no crean a todo espíritu, sino prueben los espíritus para ver si son de Dios, porque muchos falsos profetas han salido al mundo. (1 Juan 4:1)
Pero debes saber (comprender) esto: que en los últimos días vendrán tiempos difíciles. (2 Timoteo 3:1)
El Espíritu dice claramente que en los últimos tiempos algunos se apartarán de la fe, prestando atención a espíritus engañadores y a doctrinas de demonios, (1 Timoteo 4:1)
Y la bestia fue apresada, junto con el falso profeta que hacía señales en su presencia, con las cuales engañaba a los que habían recibido la marca de la bestia y a los que adoraban su imagen. Los dos fueron arrojados vivos al lago de fuego que arde con azufre. (Apocalipsis 19:20)
La venida del impío será conforme a la actividad de Satanás, con todo poder y señales y prodigios mentirosos, (2 Tesalonicenses 2:9)
Y fue arrojado el gran dragón, la serpiente antigua que se llama Diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero. Fue arrojado a la tierra y sus ángeles fueron arrojados con él. (Apocalipsis 12:9)
Se llenó su tierra de ranas Hasta en las alcobas de sus reyes. (Salmos 105:30)
Pero se levantaron falsos profetas entre el pueblo, así como habrá también falsos maestros entre ustedes, los cuales encubiertamente introducirán herejías destructoras, negando incluso al Señor que los compró (los rescató), trayendo sobre sí una destrucción repentina. (2 Pedro 2:1)
Y el diablo que los engañaba fue arrojado al lago de fuego y azufre, donde también están la bestia y el falso profeta. Y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos. (Apocalipsis 20:10)
Vi otra bestia que subía de la tierra. Tenía dos cuernos semejantes a los de un cordero y hablaba como un dragón. (Apocalipsis 13:11)
El dragón se paró sobre la arena del mar. Y vi que subía del mar una bestia que tenía diez cuernos y siete cabezas. En sus cuernos había diez diademas (coronas), y en sus cabezas había nombres blasfemos. (Apocalipsis 13:1)
Entonces apareció otra señal en el cielo: Un gran dragón rojo que tenía siete cabezas y diez cuernos, y sobre sus cabezas había siete diademas (coronas). (Apocalipsis 12:3)
Y gritó con potente voz: "¡Cayó, cayó la gran Babilonia! Se ha convertido en habitación de demonios, en guarida de todo espíritu inmundo y en guarida de toda ave inmunda y aborrecible. (Apocalipsis 18:2)
Pero si te niegas a dejarlos ir, entonces heriré todo tu territorio con ranas. (Éxodo 8:2)
Pues son espíritus de demonios que hacen señales, los cuales van a los reyes de todo el mundo, a reunirlos para la batalla del gran día del Dios Todopoderoso. (Apocalipsis 16:14)