Y NUNCA MAS ME ACORDARE DE SUS PECADOS E INIQUIDADES."
(Hebreos 10:17)
Ahora bien, donde hay perdón (remisión) de estas cosas, ya no hay ofrenda por el pecado.
(Hebreos 10:18)
Entonces, hermanos, puesto que tenemos confianza para entrar al Lugar Santísimo por la sangre de Jesús,
(Hebreos 10:19)
por un camino nuevo y vivo que El inauguró para nosotros por medio del velo, es decir, Su carne,
y puesto que tenemos un gran Sacerdote sobre la casa de Dios,
(Hebreos 10:21)
acerquémonos con corazón sincero (verdadero), en plena certidumbre de fe, teniendo nuestro corazón purificado de mala conciencia y nuestro cuerpo lavado con agua pura.
(Hebreos 10:22)
Mantengamos firme la profesión de nuestra esperanza sin vacilar, porque fiel es Aquél que prometió.
(Hebreos 10:23)
Otras publicaciones relacionadas con "Hebreos 10:20":
Hebreos 10:20 - Referencia Cruzada
Harás además un velo de tela azul, púrpura y escarlata, y de lino fino torcido. Será hecho con querubines, obra de hábil artífice.
(Éxodo 26:31)
sólo que no ha de entrar hasta el velo o acercarse al altar, porque tiene defecto, para que no profane Mis santuarios; porque Yo soy el SEÑOR que los santifico.'"
(Levítico 21:23)
poniendo fin a la enemistad en Su carne, la Ley de los mandamientos expresados en ordenanzas, para crear en El mismo de los dos un nuevo hombre, estableciendo así la paz,
(Efesios 2:15)
Y detrás del segundo velo había un tabernáculo llamado el Lugar Santísimo,
(Hebreos 9:3)
El SEÑOR le dijo a Moisés: "Dile a tu hermano Aarón que no entre en cualquier tiempo en el lugar santo detrás del velo, delante del propiciatorio que está sobre el arca, no sea que muera; porque Yo apareceré en la nube sobre el propiciatorio.
(Levítico 16:2)
Después degollará el macho cabrío de la ofrenda por el pecado que es por el pueblo, y llevará su sangre detrás del velo y hará con ella como hizo con la sangre del novillo, y la rociará sobre el propiciatorio y delante del propiciatorio.
(Levítico 16:15)
En esto ustedes conocen el Espíritu de Dios: todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios.
(1 Juan 4:2)
Hizo además, el velo de tela azul, púrpura y escarlata y lino fino torcido. Lo hizo con querubines, obra de hábil artífice.
(Éxodo 36:35)
Jesús le dijo: "Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por Mí.
(Juan 14:6)
Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguien come de este pan, vivirá para siempre; y el pan que Yo también daré por la vida del mundo es Mi carne."
(Juan 6:51)
Queriendo el Espíritu Santo dar a entender esto: que el camino al Lugar Santísimo aún no había sido revelado en tanto que el primer tabernáculo permaneciera en pie.
(Hebreos 9:8)
Porque también Cristo (el Mesías) murió por los pecados una sola vez, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, muerto en la carne pero vivificado en el espíritu.
(1 Pedro 3:18)
Pues muchos engañadores han salido al mundo que no confiesan que Jesucristo ha venido en carne. Ese es el engañador y el anticristo.
(2 Juan 1:7)
En ese momento el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo, y la tierra tembló y las rocas se partieron;
(Mateo 27:51)
al eclipsarse el sol. El velo del templo se rasgó en dos.
(Lucas 23:45)
E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: El fue manifestado en la carne, Vindicado (Justificado) en el Espíritu, Contemplado por ángeles, Proclamado entre las naciones, Creído en el mundo, Recibido arriba en gloria.
(1 Timoteo 3:16)
Yo soy la puerta; si alguno entra por Mí, será salvo; y entrará y saldrá y hallará pasto.
(Juan 10:9)
Tenemos como ancla del alma, una esperanza segura y firme, y que penetra hasta detrás del velo,
(Hebreos 6:19)
Y el velo del templo se rasgó en dos, de arriba abajo.
(Marcus 15:38)
Entonces Jesús les dijo de nuevo: "En verdad les digo: Yo soy la puerta de las ovejas.
(Juan 10:7)