pues en verdad ellos llegaron a ser sacerdotes sin juramento, pero El, por un juramento del que Le dijo: "EL SEÑOR HA JURADO Y NO CAMBIARA: 'TU ERES SACERDOTE PARA SIEMPRE.'" (Hebreos 7:21)

Por eso, Jesús ha venido a ser fiador (la garantía) de un mejor pacto. (Hebreos 7:22)

Los sacerdotes anteriores eran más numerosos porque la muerte les impedía continuar, (Hebreos 7:23)

pero Jesús conserva Su sacerdocio inmutable (intransferible) puesto que permanece para siempre.

Por lo cual El también es poderoso para salvar para siempre a los que por medio de El se acercan a Dios, puesto que vive perpetuamente para interceder por ellos. (Hebreos 7:25)

Porque convenía que tuviéramos tal Sumo Sacerdote: santo, inocente, inmaculado, apartado de los pecadores, y exaltado más allá de los cielos, (Hebreos 7:26)

que no necesita, como aquellos sumos sacerdotes, ofrecer sacrificios diariamente, primero por sus propios pecados y después por los pecados del pueblo. Porque esto Jesús lo hizo una vez para siempre, cuando El mismo se ofreció. (Hebreos 7:27)

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Hebreos 7:24 - Referencia Cruzada

Aquí, ciertamente hombres mortales reciben el diezmo, pero allí, los recibe uno de quien se da testimonio de que vive. (Hebreos 7:8)

Pero levantaré para Mí un sacerdote fiel que hará conforme a los deseos de Mi corazón y de Mi alma; y le edificaré una casa duradera, y él andará siempre delante de Mi ungido. (1 Samuel 2:35)

y el que vive, y estuve muerto. Pero ahora estoy vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la muerte y del Hades (región de los muertos). (Apocalipsis 1:18)

Porque la Ley designa como sumos sacerdotes a hombres débiles, pero la palabra del juramento, que vino después de la Ley, designa al Hijo, hecho perfecto para siempre. (Hebreos 7:28)

Porque un Niño nos ha nacido, un Hijo nos ha sido dado, Y la soberanía reposará sobre Sus hombros. Y se llamará Su nombre Admirable Consejero, Dios Poderoso, Padre Eterno, Príncipe de Paz. (Isaías 9:6)

sabiendo que Cristo, habiendo resucitado de entre los muertos, no volverá a morir; la muerte ya no tiene dominio sobre El. (Romanos 6:9)

Jesucristo es el mismo ayer y hoy y por los siglos. (Hebreos 13:8)

Entonces la multitud Le respondió: "Hemos oído en la Ley que el Cristo (el Mesías) permanecerá para siempre; ¿y cómo dices Tú: 'El Hijo del Hombre tiene que ser levantado'? ¿Quién es este Hijo del Hombre?" (Juan 12:34)