Les aseguro, hermanos, por la satisfacción (gloria) que siento por ustedes en Cristo Jesús nuestro Señor, que cada día estoy en peligro de muerte. (1 Corintios 15:31)

Si por motivos humanos luché contra fieras en Efeso, ¿de qué me aprovecha? Si los muertos no resucitan, COMAMOS Y BEBAMOS, QUE MAÑANA MORIREMOS. (1 Corintios 15:32)

No se dejen engañar: "Las malas compañías corrompen las buenas costumbres." (1 Corintios 15:33)

Sean sobrios, como conviene, y dejen de pecar; porque algunos no tienen conocimiento de Dios. Para vergüenza de ustedes lo digo.

Pero alguien dirá: "¿Cómo resucitan los muertos? ¿Y con qué clase de cuerpo vienen?" (1 Corintios 15:35)

¡Necio! Lo que tú siembras no llega a tener vida si antes no muere. (1 Corintios 15:36)

Y lo que siembras, no siembras el cuerpo que nacerá, sino el grano desnudo, quizás de trigo o de alguna otra especie. (1 Corintios 15:37)

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1 Corintios 15:34 - Referencia Cruzada

Tiemblen, y no pequen; Mediten en su corazón sobre su lecho, y callen. (Selah) (Salmos 4:4)

Despierten, borrachos, y lloren, Y giman todos los que beben vino, A causa del vino dulce Que les quitan de la boca. (Joel 1:5)

Ninguno, Señor," respondió ella. Entonces Jesús le dijo: "Yo tampoco te condeno. Vete; y desde ahora no peques más." (Juan 8:11)

El capitán se le acercó y le dijo: "¿Cómo es que estás durmiendo? ¡Levántate, invoca a tu Dios! Quizás tu Dios piense en nosotros y no pereceremos." (Jonás 1:6)

Por esta razón dice: "Despierta, tú que duermes, Y levántate de entre los muertos, Y te alumbrará Cristo." (Efesios 5:14)

Para vergüenza suya lo digo. ¿Acaso no hay entre ustedes algún hombre sabio que pueda juzgar entre sus hermanos, (1 Corintios 6:5)

no en pasión degradante, como los Gentiles (paganos) que no conocen a Dios. (1 Tesalonicenses 4:5)

Acerca de esto tenemos mucho que decir, y es difícil de explicar, puesto que ustedes se han hecho tardos para oír. (Hebreos 5:11)

En mi corazón he atesorado Tu palabra, Para no pecar contra Ti. (Salmos 119:11)

Y así como ellos no tuvieron a bien reconocer a Dios, Dios los entregó a una mente depravada, para que hicieran las cosas que no convienen. (Romanos 1:28)

Después de esto Jesús lo halló en el templo y le dijo: "Mira, has sido sanado; no peques más, para que no te suceda algo peor." (Juan 5:14)

Sin embargo, no todos tienen este conocimiento. Porque algunos, estando acostumbrados al ídolo hasta ahora, comen alimento como si éste fuera sacrificado a un ídolo, y su conciencia, siendo débil, se mancha. (1 Corintios 8:7)

Y hagan todo esto, conociendo el tiempo, que ya es hora de despertarse del sueño. Porque ahora la salvación está más cerca de nosotros que cuando creímos. (Romanos 13:11)