Nueva Biblia Latinoamericana
los que lloran, como si no lloraran; los que se regocijan, como si no se regocijaran; los que compran, como si no tuvieran nada; (1 Corintios 7:30)
los que aprovechan el mundo, como si no lo aprovecharan plenamente; porque la apariencia de este mundo es pasajera. (1 Corintios 7:31)
Sin embargo, quiero que estén libres de preocupación. El soltero se preocupa por las cosas del Señor, cómo puede agradar al Señor. (1 Corintios 7:32)
Pero el casado se preocupa por las cosas del mundo, de cómo agradar a su mujer,
y sus intereses están divididos. La mujer que no está casada y la virgen se preocupan por las cosas del Señor, para ser santas tanto en cuerpo como en espíritu; pero la casada se preocupa por las cosas del mundo, de cómo agradar a su marido. (1 Corintios 7:34)
Esto digo para su propio beneficio; no para ponerles restricción, sino para promover lo que es honesto y para asegurar su constante devoción al Señor. (1 Corintios 7:35)
Y si alguien cree que no está obrando correctamente con respecto a su hija virgen, si ella es de edad madura, y si es necesario que así se haga, que haga lo que quiera, no peca; que se case. (1 Corintios 7:36)

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1 Corintios 7:33 - Referencia Cruzada

Y hubo gran clamor del pueblo y de sus mujeres contra sus hermanos Judíos. (Nehemías 5:1)
Que el marido cumpla su deber para con su mujer, e igualmente la mujer lo cumpla con el marido. (1 Corintios 7:3)
y a que tengan por su ambición el llevar una vida tranquila, y se ocupen en sus propios asuntos y trabajen con sus manos, tal como les hemos mandado; (1 Tesalonicenses 4:11)
A Sus discípulos Jesús les dijo: "Por eso les digo que no se preocupen por su vida, qué comerán; ni por su cuerpo, qué vestirán. (Lucas 12:22)
Cuando llegaba el día en que Elcana ofrecía sacrificio, daba porciones a Penina su mujer y a todos sus hijos e hijas; (1 Samuel 1:4)
Pero si alguien no provee para los suyos, y especialmente para los de su casa, ha negado la fe y es peor que un incrédulo. (1 Timoteo 5:8)
Maridos, amen a sus mujeres, así como Cristo amó a la iglesia y se dio El mismo por ella, (Efesios 5:25)
Ustedes, maridos, igualmente, convivan de manera comprensiva con sus mujeres, como con un vaso más frágil, puesto que es mujer, dándole honor por ser heredera como ustedes de la gracia de la vida, para que sus oraciones no sean estorbadas. (1 Pedro 3:7)
Maridos, amen a sus mujeres y no sean ásperos con ellas. (Colosenses 3:19)