Nueva Biblia Latinoamericana
Como ofrenda de primicias las ofrecerán al SEÑOR, pero no ascenderán como aroma agradable sobre el altar. (Levítico 2:12)
Además, toda ofrenda de cereal tuya sazonarás con sal, para que la sal del pacto de tu Dios no falte de tu ofrenda de cereal; con todas tus ofrendas ofrecerás sal. (Levítico 2:13)
Pero si ofreces al SEÑOR una ofrenda de cereal de los primeros frutos, ofrecerás espigas verdes tostadas al fuego, granos tiernos desmenuzados, como ofrenda de cereal de tus primeros frutos. (Levítico 2:14)
Luego echarás aceite y pondrás incienso sobre ella. Es una ofrenda de cereal.
Y el sacerdote quemará como memorial parte de los granos desmenuzados, con su aceite y con todo su incienso. Es una ofrenda encendida para el SEÑOR. (Levítico 2:16)
Si alguien ofrece su ofrenda como sacrificio de las ofrendas de paz, si la ofrece del ganado, sea macho o hembra, la ofrecerá sin defecto delante del SEÑOR. (Levítico 3:1)
Pondrá su mano sobre la cabeza de su ofrenda y la degollará a la puerta de la tienda de reunión. Entonces los sacerdotes hijos de Aarón rociarán la sangre sobre el altar por todos los lados. (Levítico 3:2)

Otras publicaciones relacionadas con "Levítico 2:15":

Dr. Roberto Miranda
Generosidad y gratitud
En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de la generosidad y la gratitud en la vida de un creyente en Cristo, destacando la historia de David en Primera de Crónicas y la importancia de las ofrendas en la tradición del pueblo de Dios.


Dr. Roberto Miranda
El valor de la generosidad y de la gratitud
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda explora el valor de la generosidad y la gratitud en el contexto de la ofrenda especial que David hizo al Señor. También destaca la importancia de tener un corazón contrito y humillado al ofrecer nuestras ofrendas al Señor y comprometernos a caminar en obediencia y gratitud.


Levítico 2:15 - Referencia Cruzada