Nueva Biblia Latinoamericana
Le respondieron: "Podemos." Y Jesús les dijo: "La copa que Yo bebo, beberán; y serán bautizados con el bautismo con que Yo soy bautizado; (Marcus 10:39)
pero el sentarse a Mi derecha o a Mi izquierda, no es Mío el concederlo, sino que es para quienes ha sido preparado." (Marcus 10:40)
Al oír esto, los diez comenzaron a indignarse contra Jacobo y Juan. (Marcus 10:41)
Llamándolos junto a El, Jesús les dijo: "Ustedes saben que los que son reconocidos como gobernantes de los Gentiles se enseñorean de ellos, y que sus grandes ejercen autoridad sobre ellos.
Pero entre ustedes no es así, sino que cualquiera de ustedes que desee llegar a ser grande será su servidor, (Marcus 10:43)
y cualquiera de ustedes que desee ser el primero será siervo de todos. (Marcus 10:44)
Porque ni aun el Hijo del Hombre vino para ser servido, sino para servir, y para dar Su vida en rescate por muchos." (Marcus 10:45)

Otras publicaciones relacionadas con "Marcus 10:42":

Isaías Rivera
Servir con gozo
Isaías Rivera habla sobre la importancia de ser un servidor en el reino de Dios y estar dispuesto a tomar la copa y el bautismo de servir. Destaca la importancia de la humildad y la unidad en la iglesia y exhorta a los cristianos a estar dispuestos a servir y ser humildes en su servicio.


Dr. Roberto Miranda
Tenemos que ser imitadores de Cristo para resolver los conflictos
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda explora la importancia de imitar a Cristo en la resolución de conflictos y cómo la actitud de servicio y humildad es clave en el Reino de Dios.


Marcus 10:42 - Referencia Cruzada

tampoco como teniendo señorío sobre los que les han sido confiados, sino demostrando ser (convirtiéndose en) ejemplos del rebaño. (1 Pedro 5:3)
Pero Jesús, llamándolos junto a El, dijo: "Ustedes saben que los gobernantes de los Gentiles se enseñorean de ellos, y que los grandes ejercen autoridad sobre ellos. (Mateo 20:25)
Y Jesús les dijo: "Los reyes de los Gentiles se enseñorean de ellos; y los que tienen autoridad sobre ellos son llamados bienhechores. (Lucas 22:25)