Nueva Biblia Latinoamericana
Alza tus ojos a las alturas desoladas y mira; ¿Dónde no te has prostituido? Junto a los caminos te sentabas para ellos Como el Arabe en el desierto. Has profanado la tierra Con tu prostitución y tu maldad. (Jeremías 3:2)
Por eso fueron detenidas las lluvias, Y no hubo lluvia de primavera; Pero tú tenías frente de ramera, No quisiste avergonzarte. (Jeremías 3:3)
¿No acabas de llamarme: 'Padre Mío, Tú eres el amigo (guía) de mi juventud'? pensando: (Jeremías 3:4)
¿Guardará rencor para siempre? ¿Estará indignado hasta el fin?' Así has hablado, Pero has hecho lo malo, Y has hecho tu voluntad."
El SEÑOR me dijo en días del rey Josías: "¿Has visto lo que hizo la infiel Israel? Ella andaba sobre todo monte alto y bajo todo árbol frondoso, y allí se prostituía. (Jeremías 3:6)
Y me dije: 'Después que ella haya hecho todas estas cosas, volverá a Mí'; pero no regresó, y lo vio su rebelde hermana Judá. (Jeremías 3:7)
Y vio que a causa de todos los adulterios de la infiel Israel, Yo la había despedido, dándole carta de divorcio. Con todo, su rebelde hermana Judá no tuvo temor, sino que ella también fue y se hizo ramera. (Jeremías 3:8)

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Jeremías 3:5 - Referencia Cruzada

Ve y proclama estas palabras al norte, y di: 'Regresa, infiel Israel,' declara el SEÑOR, 'no te miraré con ira, Porque soy misericordioso,' declara el SEÑOR; 'no guardaré rencor para siempre. (Jeremías 3:12)
¿Rechazará el Señor para siempre? ¿No mostrará más Su favor? (Salmos 77:7)
No Te enojes en exceso, oh SEÑOR, Ni para siempre Te acuerdes de la iniquidad. Mira, Te rogamos, todos nosotros somos Tu pueblo. (Isaías 64:9)
¡Ay de la rebelde y contaminada, La ciudad opresora! (Sofonías 3:1)
¿Estarás enojado con nosotros para siempre? ¿Prolongarás Tu ira de generación en generación? (Salmos 85:5)
¡Ay de los que planean la iniquidad, Los que traman el mal en sus camas! Al clarear la mañana lo ejecutan, Porque está en el poder de sus manos. (Miqueas 2:1)
Los príncipes de Israel, cada uno según su poder, han estado en ti para derramar sangre. (Ezequiel 22:6)
Porque no estaré en pleito para siempre, Ni estaré siempre enojado, Pues el espíritu desfallecería ante Mí, Y el aliento de los que Yo he creado. (Isaías 57:16)
Compasivo y clemente es el SEÑOR, Lento para la ira y grande en misericordia. (Salmos 103:8)
Para el mal las dos manos son diestras. El príncipe pide, y también el juez, una recompensa, El grande habla de lo que desea su alma, Y juntos lo traman. (Miqueas 7:3)