Nueva Biblia Latinoamericana
Aunque bramen y se agiten sus aguas, Aunque tiemblen los montes con creciente enojo. (Selah) (Salmos 46:3)
Hay un río cuyas corrientes alegran la ciudad de Dios, Las moradas santas del Altísimo. (Salmos 46:4)
Dios está en medio de ella, no será sacudida; Dios la ayudará al romper el alba. (Salmos 46:5)
Bramaron las naciones, se tambalearon los reinos; Dio El Su voz, y la tierra se derritió.
El SEÑOR de los ejércitos está con nosotros; Nuestro baluarte es el Dios de Jacob. (Selah) (Salmos 46:7)
Vengan, contemplen las obras del SEÑOR, Que ha hecho asolamientos en la tierra; (Salmos 46:8)
Que hace cesar las guerras hasta los confines de la tierra; Quiebra el arco, parte la lanza, Y quema los carros en el fuego. (Salmos 46:9)

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Salmos 46:6 - Referencia Cruzada

Tú, pues, profetizarás contra ellos todas estas palabras, y les dirás: 'El SEÑOR rugirá desde lo alto, Y dará Su voz desde Su santa morada; Rugirá fuertemente contra Su rebaño. Dará gritos como los que pisan las uvas Contra todos los habitantes de la tierra. (Jeremías 25:30)
El Señor, DIOS de los ejércitos, El que toca la tierra, y ésta se derrite, Y se lamentan todos los que en ella habitan, Sube toda ella como el Nilo Y disminuye como el Nilo de Egipto; (Amós 9:5)
Amós dijo: "El SEÑOR ruge desde Sion, Y desde Jerusalén da Su voz; Los pastizales (rediles) de los pastores están de duelo, Y se seca la cumbre del Monte Carmelo." (Amós 1:2)
Debajo de El los montes se derretirán, Y los valles se partirán, Como la cera ante el fuego, Como las aguas derramadas por una pendiente. (Miqueas 1:4)
y dijo a los hombres: "Sé que el SEÑOR les ha dado esta tierra, y que el terror de ustedes ha caído sobre nosotros, y que todos los habitantes del país se han acobardado ante ustedes. (Josué 2:9)
Cuando oímos esto, nos acobardamos, no quedando ya valor en hombre alguno por causa de ustedes. Porque el SEÑOR, el Dios de ustedes, es Dios arriba en los cielos y abajo en la tierra. (Josué 2:11)
Se levantaron muy de mañana y salieron al desierto de Tecoa. Cuando salían, Josafat se puso en pie y dijo: "Oiganme, Judá y habitantes de Jerusalén, confíen en el SEÑOR su Dios, y estarán seguros. Confíen en Sus profetas y triunfarán." (2 Crónicas 20:20)
Canten al que cabalga sobre los cielos de los cielos, que son desde la antigüedad; El da Su voz, voz poderosa. (Salmos 68:33)
Entonces Isaías, hijo de Amoz, envió a decir a Ezequías: "Así dice el SEÑOR, Dios de Israel: 'Por cuanto Me has rogado acerca de Senaquerib, rey de Asiria, (Isaías 37:21)
Delante de El va la pestilencia, Y la plaga sigue Sus pasos. (Habacuc 3:5)
Aconteció después de esto, que los Moabitas, los Amonitas, y con ellos algunos de los Meunitas, vinieron a pelear contra Josafat. (2 Crónicas 20:1)
Zera el etíope salió contra ellos con un ejército de 1,000,000 de hombres y 300 carros, y vino hasta Maresa. (2 Crónicas 14:9)
Como cera se derritieron los montes ante la presencia del SEÑOR, Ante la presencia del Señor de toda la tierra. (Salmos 97:5)
¿Por qué se sublevan las naciones, Y los pueblos traman cosas vanas? (Salmos 2:1)
El SEÑOR también tronó en los cielos, Y el Altísimo dio Su voz: Granizo y carbones encendidos. (Salmos 18:13)
Vienen días," declara el SEÑOR "cuando el arador alcanzará al segador, Y el que pisa la uva al que siembra la semilla; Cuando destilarán vino dulce los montes, Y todas las colinas se derretirán. (Amós 9:13)
Tembló la tierra; También se derramaron los cielos ante la presencia de Dios; El Sinaí mismo tembló delante de Dios, el Dios de Israel. (Salmos 68:8)
¡Cómo has caído del cielo, Oh lucero de la mañana, hijo de la aurora! Has sido derribado por tierra, Tú que debilitabas a las naciones. (Isaías 14:12)
y las estrellas del cielo cayeron a la tierra, como la higuera deja caer sus higos verdes al ser sacudida por un fuerte viento. (Apocalipsis 6:13)
Y dijeron a Josué: "Ciertamente, el SEÑOR ha entregado toda la tierra en nuestras manos, y además, todos los habitantes de la tierra se han acobardado ante nosotros." (Josué 2:24)
El SEÑOR da Su voz delante de Su ejército, Porque es inmenso Su campamento, Porque poderoso es el que ejecuta Su palabra. Grande y terrible es en verdad el día del SEÑOR, ¿Y quién podrá soportarlo? (Joel 2:11)
Los montes tiemblan ante El, Y los collados se derriten. Sí, en Su presencia se levanta la tierra, El mundo y todos los que en él habitan. (Nahúm 1:5)
Pero el día del Señor vendrá como ladrón, en el cual los cielos pasarán con gran estruendo, y los elementos serán destruidos con fuego intenso, y la tierra y las obras que hay en ella serán quemadas. (2 Pedro 3:10)
¡Oh, si rasgaras los cielos y descendieras! Si los montes se estremecieran ante Tu presencia (Isaías 64:1)
Te vieron los montes y temblaron, El diluvio de aguas pasó; Dio el abismo su voz, Levantó en alto sus manos. (Habacuc 3:10)
Porque, Tus enemigos rugen, Y los que Te aborrecen se han enaltecido. (Salmos 83:2)
Quebrántense, pueblos, que serán destrozados; Presten oído, confines todos de la tierra. Prepárense, que serán destrozados; Prepárense, que serán destrozados. (Isaías 8:9)
Vi un gran trono blanco y a Aquél que estaba sentado en él, de cuya presencia huyeron la tierra y el cielo, y no se halló lugar para ellos. (Apocalipsis 20:11)