Nueva Biblia Latinoamericana
En Ti pondrán su confianza los que conocen Tu nombre, Porque Tú, oh SEÑOR, no abandonas a los que Te buscan. (Salmos 9:10)
Canten alabanzas al SEÑOR, que mora en Sion; Proclamen entre los pueblos Sus proezas. (Salmos 9:11)
Porque el que pide cuentas de la sangre derramada, se acuerda de ellos; No olvida el clamor de los afligidos. (Salmos 9:12)
Oh SEÑOR, ten piedad de mí; Mira mi aflicción por causa de los que me aborrecen, Tú que me levantas de las puertas de la muerte;
Para que yo cuente todas Tus alabanzas, Para que en las puertas de la hija de Sion Me regocije en Tu salvación. (Salmos 9:14)
Las naciones se han hundido en el foso que hicieron; En la red que escondieron, su propio pie quedó prendido. (Salmos 9:15)
El SEÑOR se ha dado a conocer; Ha ejecutado juicio. El impío es atrapado en la obra de sus propias manos. (Higaion, Selah) (Salmos 9:16)

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Salmos 9:13 - Referencia Cruzada

Pues Tú has librado mi alma de la muerte, Y mis pies de tropiezo, Para que yo pueda andar delante de Dios En la luz de la vida. (Salmos 56:13)
Para el director del coro. Salmo de David, cuando después que se llegó a Betsabé, el profeta Natán lo visitó. Ten piedad de mí, oh Dios, conforme a Tu misericordia; Conforme a lo inmenso de Tu compasión, borra mis transgresiones. (Salmos 51:1)
Y había allí seis tinajas de piedra, puestas para ser usadas en el rito de la purificación de los Judíos; en cada una cabían dos o tres cántaros (unos 100 litros). (Juan 2:6)
Considera y respóndeme, oh SEÑOR, Dios mío; Ilumina mis ojos, no sea que duerma el sueño de la muerte; (Salmos 13:3)
Vuélvete a mí y tenme piedad, Como acostumbras con los que aman Tu nombre. (Salmos 119:132)
Yo dije: "A la mitad de mis días He de entrar por las puertas del Seol (región de los muertos); Se me priva del resto de mis años." (Isaías 38:10)
Porque grande es Tu misericordia para conmigo, Y has librado mi alma de las profundidades del Seol. (Salmos 86:13)
Ahora pues, Dios nuestro, Dios grande, poderoso y temible, que guardas el pacto y la misericordia, No parezca insignificante ante Ti toda la aflicción Que nos ha sobrevenido, a nuestros reyes, a nuestros príncipes, a nuestros sacerdotes, a nuestros profetas, a nuestros padres y a todo Tu pueblo, Desde los días de los reyes de Asiria hasta el día de hoy. (Nehemías 9:32)
Mira mis enemigos, que son muchos, Y con odio violento me detestan. (Salmos 25:19)
Su alma aborreció todo alimento, Y se acercaron hasta las puertas de la muerte. (Salmos 107:18)
Pero mis enemigos son vigorosos y fuertes; Muchos son los que sin causa me aborrecen. (Salmos 38:19)
Su inmundicia está en sus faldas; No consideró su futuro, Por tanto ha caído de manera sorprendente; No hay quien la consuele. "Mira, oh SEÑOR, mi aflicción, Porque se ha engrandecido el enemigo." (Lamentaciones 1:9)
Resh. Mira mi aflicción y líbrame, Porque no me olvido de Tu ley. (Salmos 119:153)
Oh SEÑOR, has sacado mi alma del Seol; Me has guardado con vida, para que no descienda al sepulcro. (Salmos 30:3)
Los lazos de la muerte me rodearon, Y los terrores del Seol vinieron sobre mí; Angustia y tristeza encontré. (Salmos 116:3)
Todo su pueblo gime buscando pan; Han dado sus tesoros a cambio de comida Para restaurar sus vidas. "Mira, oh SEÑOR, y observa Que me están despreciando." (Lamentaciones 1:11)
Atiende a mi clamor, Porque estoy muy abatido; Líbrame de los que me persiguen, Porque son más fuertes que yo. (Salmos 142:6)