Nueva Biblia Latinoamericana
Y ha vivido en ciudades desoladas, En casas inhabitables, Destinadas a convertirse en ruinas. (Job 15:28)
No se enriquecerá, ni sus bienes perdurarán, Ni su espiga se inclinará a tierra. (Job 15:29)
No escapará de las tinieblas, Secará la llama sus renuevos, Y por el soplo de Su boca desaparecerá. (Job 15:30)
Que no confíe en la vanidad, engañándose a sí mismo, Pues vanidad será su recompensa.
Antes de su tiempo se cumplirá, Y la hoja de su palmera no reverdecerá. (Job 15:32)
Dejará caer sus uvas verdes como la vid, Y como el olivo dejará caer su flor. (Job 15:33)
Porque estéril es la compañía de los impíos, Y el fuego consume las tiendas del corrupto. (Job 15:34)

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Job 15:31 - Referencia Cruzada

No confíen ustedes en la opresión, Ni en el robo pongan su esperanza; Si las riquezas aumentan, no pongan el corazón en ellas . (Salmos 62:10)
No hay quien clame con justicia ni quien abogue con honestidad. Confían en la confusión, y hablan falsedades; Conciben malicia, y dan a luz iniquidad. (Isaías 59:4)
No se dejen engañar, de Dios nadie se burla; pues todo lo que el hombre siembre, eso también segará. (Gálatas 6:7)
Que nadie los engañe con palabras vanas, pues por causa de estas cosas la ira de Dios viene sobre los hijos de desobediencia. (Efesios 5:6)
Por lo que yo he visto, los que aran iniquidad Y los que siembran aflicción, eso siegan. (Job 4:8)
Porque te olvidaste del Dios de tu salvación Y no te acordaste de la Roca de tu refugio. Por tanto, siembras plantas deleitosas Y les injertas sarmientos de un dios extraño. (Isaías 17:10)
El que siembra iniquidad segará vanidad, Y la vara de su furor perecerá. (Proverbios 22:8)
En El están la fuerza y la prudencia, Suyos son el engañado y el engañador. (Job 12:16)
Porque si alguien se cree que es algo, no siendo nada, se engaña a sí mismo. (Gálatas 6:3)
Porque siembran viento, Y recogerán tempestades. El trigo no tiene espigas, No da grano, Y si lo diera, se lo tragarían los extraños. (Oseas 8:7)
Se alimenta de cenizas; el corazón engañado le ha extraviado. A sí mismo no se puede librar, ni decir: "¿No es mentira lo que tengo en mi diestra?" (Isaías 44:20)
Los que confían en ídolos vanos Su propia misericordia abandonan. (Jonás 2:8)