Que retires de mí Tu mano, Y que no me espante Tu terror.
(Job 13:21)
Entonces llámame, y yo responderé; O déjame hablar, y respóndeme Tú.
(Job 13:22)
¿Cuántas son mis iniquidades y pecados? Hazme conocer mi rebelión y mi pecado.
(Job 13:23)
¿Por qué escondes Tu rostro Y me consideras Tu enemigo?
¿Harás que tiemble una hoja llevada por el viento, O perseguirás a la paja seca?
(Job 13:25)
Pues escribes contra mí cosas amargas, Y me haces responsable de las iniquidades de mi juventud.
(Job 13:26)
Pones mis pies en el cepo, Y vigilas todas mis sendas; Pones límite a las plantas de mis pies,
(Job 13:27)
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Job 13:24 - Referencia Cruzada
Sin embargo, no lo tengan por enemigo, sino amonéstenlo como a un hermano.
(2 Tesalonicenses 3:15)
Dios busca pretextos contra mí; Me tiene como Su enemigo.
(Job 33:10)
También ha encendido Su ira contra mí Y me ha considerado Su enemigo.
(Job 19:11)
De noche me acordaré de mi canción; En mi corazón meditaré, Y mi espíritu indaga:
(Salmos 77:6)
Aguardaré al SEÑOR que esconde Su rostro de la casa de Jacob. Sí, a El esperaré.
(Isaías 8:17)
Y Samuel dijo: "¿Entonces, por qué me preguntas a mí, ya que el SEÑOR se ha apartado de ti y se ha hecho tu enemigo?
(1 Samuel 28:16)
¿Por qué, oh SEÑOR, Te mantienes alejado, Y Te escondes en tiempos de tribulación?
(Salmos 10:1)
¡Quién me diera volver a ser como en meses pasados, Como en los días en que Dios velaba sobre mí;
(Job 29:2)
Le diré a Dios: 'No me condenes, Hazme saber que tienes contra mí.
(Job 10:2)
Entonces El dijo: 'Esconderé de ellos Mi rostro, Veré cuál será su fin; Porque son una generación perversa, Hijos en los cuales no hay fidelidad.
(Deuteronomio 32:20)
¡Quién me diera que alguien me oyera! Aquí está mi firma. ¡Que me responda el Todopoderoso! Y la acusación que ha escrito mi adversario,
(Job 31:35)
¿Por qué escondes Tu rostro Y te olvidas de nuestra aflicción y de nuestra opresión?
(Salmos 44:24)
Se ha vuelto el Señor como enemigo: Ha devorado a Israel, Ha devorado todos sus palacios, Ha destruido sus fortalezas Y ha multiplicado en la hija de Judá El lamento y el duelo.
(Lamentaciones 2:5)
Su ira me ha despedazado y me ha perseguido, Contra mí El ha rechinado los dientes; Mi adversario aguza los ojos contra mí.
(Job 16:9)
¿Por qué, SEÑOR, rechazas mi alma? ¿Por qué escondes de mí Tu rostro?
(Salmos 88:14)
Te has vuelto cruel conmigo, Con el poder de Tu mano me persigues.
(Job 30:21)
Para el director del coro. Salmo de David. ¿Hasta cuándo, oh SEÑOR? ¿Me olvidarás para siempre? ¿Hasta cuándo esconderás de mí Tu rostro?
(Salmos 13:1)