Nueva Biblia Latinoamericana
Porque nosotros somos de ayer y nada sabemos, Pues nuestros días sobre la tierra son como una sombra. (Job 8:9)
¿No te instruirán ellos y te hablarán, Y de sus corazones sacarán palabras? (Job 8:10)
¿Puede crecer el papiro sin cenagal? ¿Puede el junco crecer sin agua? (Job 8:11)
Estando aún verde y sin cortar, Con todo, se seca antes que cualquier otra planta.
Así son las sendas de todos los que se olvidan de Dios. Así perecerá la esperanza del impío, (Job 8:13)
Porque es frágil su confianza, Y una tela de araña su seguridad. (Job 8:14)
Confía en su casa, pero ésta no se sostiene; Se aferra a ella, pero ésta no perdura. (Job 8:15)

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Miriam Carrasquillo
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Reflexión sobre la brevedad de la vida en la tierra y la importancia de vivir para agradar a Dios, mientras nos preparamos para la eternidad. author: Miriam Carrasquillo, title: Esta tierra no es eterna y pasará tan rápido como el día de ayer, summary: La vida en esta tierra es corta y perecedera, por lo que no debemos apegarnos demasiado a las cosas de este mundo. Debemos arraigarnos en las promesas de Dios y vivir nuestra estadía en la tierra para agradarle a Él, sabiendo que nuestra eternidad está en los cielos. Solo Dios sabe cuánto tiempo le queda a esta tierra, por lo que debemos aprovechar cada momento para equiparnos para la eternidad.


Omar Soto
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El artículo habla sobre la importancia de buscar el favor de Dios en nuestras vidas y cómo esto puede suceder si venimos a Dios con intenciones claras y correctas. También enfatiza la necesidad de arrepentirse y pedir perdón por nuestras propias decisiones y acciones. El autor comparte un testimonio personal y termina con una oración para recibir las bendiciones de Dios.


Job 8:12 - Referencia Cruzada

Será como arbusto en lugar desolado Y no verá cuando venga el bien; Habitará en pedregales en el desierto, Una tierra salada y sin habitantes. (Jeremías 17:6)
Que sean como la hierba en los techos, Que se seca antes de crecer; (Salmos 129:6)
Y aquél en quien se sembró la semilla en pedregales, éste es el que oye la palabra y enseguida la recibe con gozo; (Mateo 13:20)
y el rico en su humillación, pues él pasará como la flor de la hierba. (Santiago 1:10)
Porque: "TODA CARNE ES COMO LA HIERBA, Y TODA SU GLORIA COMO LA FLOR DE LA HIERBA. SECASE LA HIERBA, CAESE LA FLOR, (1 Pedro 1:24)