El hombre, el señor de aquella tierra, nos habló duramente y nos tomó por espías del país.
(Génesis 42:30)Pero nosotros le dijimos: 'Somos hombres honrados, no somos espías.
(Génesis 42:31)Eramos doce hermanos, hijos de nuestro padre. Uno ya no existe, y el menor está hoy con nuestro padre en la tierra de Canaán.'
(Génesis 42:32)Entonces el hombre, el señor de aquel país, nos dijo: 'Por esto sabré que son hombres honrados: dejen uno de sus hermanos conmigo y tomen grano para el hambre de sus casas, y márchense.
Pero tráiganme a su hermano menor para que yo sepa que ustedes no son espías, sino hombres honrados. Les devolveré a su hermano, y podrán comerciar en la tierra.'"
(Génesis 42:34)Cuando vaciaron sus sacos, el atado del dinero de cada uno estaba en su saco. Y al ver ellos y su padre los atados de su dinero, tuvieron temor.
(Génesis 42:35)Y su padre Jacob les dijo: "Ustedes me han privado de mis hijos; José ya no existe, y Simeón ya no existe, y ahora se quieren llevar a Benjamín. Todas estas cosas son contra mí."
(Génesis 42:36)Otras publicaciones relacionadas con "Génesis 42:33":
Génesis 42:33 - Referencia Cruzada
En esto serán probados; por vida de Faraón que no saldrán de este lugar a menos que su hermano menor venga aquí.
(Génesis 42:15)si son hombres honrados, que uno de sus hermanos quede encarcelado en su prisión. El resto de ustedes, vayan, lleven grano para el hambre de sus casas.
(Génesis 42:19)