Ester respondió: "Si le parece bien al rey, venga hoy el rey con Amán al banquete que le he preparado."
(Ester 5:4)
Traigan pronto a Amán para que hagamos como Ester desea," dijo el rey. Y el rey vino con Amán al banquete que Ester había preparado.
(Ester 5:5)
Y mientras bebían el vino en el banquete, el rey dijo a Ester: "¿Cuál es tu petición? Te será concedida. ¿Y cuál es tu deseo? Aun hasta la mitad del reino, se te dará."
(Ester 5:6)
Respondió Ester: "Mi petición y mi deseo es:
si he hallado gracia ante los ojos del rey, y si le place al rey conceder mi petición y hacer lo que yo pido, que venga el rey con Amán al banquete que yo les prepararé, y mañana haré conforme a la palabra del rey."
(Ester 5:8)
Aquel día Amán salió alegre y con corazón contento; pero cuando Amán vio a Mardoqueo en la puerta del rey y que éste no se levantaba ni temblaba delante de él, Amán se llenó de furor contra Mardoqueo.
(Ester 5:9)
Amán, sin embargo, se contuvo, fue a su casa, y mandó traer a sus amigos y a su mujer Zeres.
(Ester 5:10)
