porque Esdras había dedicado su corazón a estudiar la ley del SEÑOR, y a practicarla, y a enseñar Sus estatutos y ordenanzas en Israel.
(Esdras 7:10)
Esta es la copia del decreto que el rey Artajerjes dio al sacerdote Esdras, el escriba, instruido en las palabras de los mandamientos del SEÑOR y de Sus estatutos para Israel:
(Esdras 7:11)
Artajerjes, rey de reyes, al sacerdote Esdras, escriba de la ley del Dios del cielo: Paz perfecta. Y ahora
(Esdras 7:12)
yo he proclamado un decreto de que cualquiera del pueblo de Israel, de sus sacerdotes y de los Levitas en mi reino que esté dispuesto a ir a Jerusalén, puede ir contigo.
Por cuanto eres enviado por el rey y sus siete consejeros para investigar acerca de Judá y de Jerusalén conforme a la ley de tu Dios que está en tu mano,
(Esdras 7:14)
y para llevar la plata y el oro que el rey y sus consejeros han ofrendado voluntariamente al Dios de Israel, cuya morada está en Jerusalén,
(Esdras 7:15)
también lleva toda la plata y el oro que halles en toda la provincia de Babilonia, con la ofrenda voluntaria que el pueblo y los sacerdotes hayan ofrecido voluntariamente para la casa de su Dios que está en Jerusalén.
(Esdras 7:16)
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Esdras 7:13 - Referencia Cruzada
Sin embargo, en el año primero de Ciro, rey de Babilonia, el rey Ciro proclamó un decreto de que se reedificara esta casa de Dios.
(Esdras 5:13)
Porque Dios es quien obra en ustedes tanto el querer como el hacer, para Su buena intención.
(Filipenses 2:13)
El que de entre todos ustedes pertenezca a Su pueblo, sea su Dios con él. Que suba a Jerusalén, que está en Judá, y edifique la casa del SEÑOR, Dios de Israel; El es el Dios que está en Jerusalén.
(Esdras 1:3)
El Espíritu y la esposa dicen: "Ven." Y el que oye, diga: "Ven." Y el que tiene sed, venga; y el que desee, que tome gratuitamente del agua de la vida.
(Apocalipsis 22:17)
Los estableció eternamente y para siempre, Les dio ley que no pasará.
(Salmos 148:6)
Entonces el rey Darío proclamó un decreto, y buscaron en los archivos donde se guardaban los tesoros allí en Babilonia.
(Esdras 6:1)
Así que proclamaron un decreto para hacer correr la voz por todo Israel, desde Beerseba hasta Dan, para que vinieran a celebrar la Pascua al SEÑOR, Dios de Israel, en Jerusalén. Porque muchos no la habían celebrado como estaba escrito.
(2 Crónicas 30:5)
Salieron los correos apremiados por la orden del rey. El decreto fue promulgado (fue dado al pueblo) en la fortaleza de Susa, y mientras el rey y Amán se sentaron a beber, la ciudad de Susa estaba turbada.
(Ester 3:15)
El rey ordenó que así se hiciera; y un edicto fue promulgado en Susa, y los diez hijos de Amán fueron colgados.
(Ester 9:14)
Tu pueblo se ofrecerá voluntariamente en el día de Tu poder; En el esplendor de la santidad, desde el seno de la aurora; Tu juventud es para Ti como el rocío.
(Salmos 110:3)