Nueva Biblia Latinoamericana
Ellos también estaban sobre los cargadores y dirigían, de trabajo en trabajo, a todos los que hacían la obra. Algunos de los Levitas eran escribas, oficiales y porteros. (2 Crónicas 34:13)
Mientras ellos sacaban el dinero que habían traído a la casa del SEÑOR, el sacerdote Hilcías encontró el Libro de la Ley del SEÑOR dada por Moisés. (2 Crónicas 34:14)
Entonces Hilcías dijo al escriba Safán: "He hallado el Libro de la Ley en la casa del SEÑOR." Hilcías le dio el libro a Safán, (2 Crónicas 34:15)
y éste llevó el libro al rey y le dio más noticias: "Todo lo que fue encomendado a sus siervos, lo están haciendo.
También han tomado el dinero que se encontraba en la casa del SEÑOR, y lo han entregado en manos de los encargados y de los obreros." (2 Crónicas 34:17)
El escriba Safán informó también al rey: "El sacerdote Hilcías me ha dado un libro." Y Safán leyó de él en la presencia del rey. (2 Crónicas 34:18)
Cuando el rey oyó las palabras de la ley, rasgó sus vestidos. (2 Crónicas 34:19)

Otras publicaciones relacionadas con "2 Crónicas 34:16":

Dr. Roberto Miranda
II Crónicas 29
La historia de Israel en los libros de Samuel, Reyes y Crónicas provee modelos de vida y enseñanzas espirituales. El rey Ezequías es un ejemplo de un hombre recto y con pasión por Dios que fue prosperado. El fundamento de la vida de una persona y de una nación debe ser espiritual. El avivamiento en Estados Unidos debe comenzar por la casa de Dios y por una determinación firme de seguir al Señor en integridad y pasión. El avivamiento vendrá cuando nos apasionemos por Dios y lo amemos por encima de todo.


Dr. Roberto Miranda
Generosidad y gratitud
En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de la generosidad y la gratitud en la vida de un creyente en Cristo, destacando la historia de David en Primera de Crónicas y la importancia de las ofrendas en la tradición del pueblo de Dios.


2 Crónicas 34:16 - Referencia Cruzada

Y el escriba Safán vino al rey, y trajo palabra al rey, diciendo: "Sus siervos han tomado el dinero que se halló en la casa, y lo han puesto en mano de los obreros encargados de supervisar la casa del SEÑOR." (2 Reyes 22:9)
Después de haber depositado el rollo en la cámara del escriba Elisama, los oficiales entraron al atrio donde estaba el rey, y contaron a oídos del rey todas las palabras. (Jeremías 36:20)