Nueva Biblia Latinoamericana
Y sucedió que al tiempo de dar a luz, había mellizos en su seno. (Génesis 38:27)
Aconteció, además, que mientras daba a luz, uno de ellos sacó su mano, y la partera la tomó y le ató un hilo escarlata en la mano, diciendo: "Este salió primero." (Génesis 38:28)
Pero sucedió que cuando él retiró su mano, su hermano salió. Entonces ella dijo: "¡Qué brecha te has abierto!" Por eso le pusieron por nombre Fares (Brecha). (Génesis 38:29)
Después salió su hermano que tenía el hilo escarlata en la mano; y le pusieron por nombre Zara (Amanecer).
Cuando José fue llevado a Egipto, Potifar, un oficial Egipcio de Faraón, capitán de la guardia, lo compró a los Ismaelitas que lo habían llevado allá. (Génesis 39:1)
Pero el SEÑOR estaba con José, que llegó a ser un hombre próspero, y vivía en la casa de su amo el Egipcio. (Génesis 39:2)
Vio su amo que el SEÑOR estaba con él y que el SEÑOR hacía prosperar en su mano todo lo que él hacía. (Génesis 39:3)

Otras publicaciones relacionadas con "Génesis 38:30":

Dr. Roberto Miranda
La oración cambia destinos
En esta predicación, el pastor habla sobre la oración de Jabes y cómo puede cambiar destinos. Se destaca la importancia de orar desde el corazón y enfrentar las situaciones con la ayuda de Dios. La bendición de Dios es una señal de su amor y debemos pedirle que su mano poderosa nos proteja y nos guíe en todo momento. Además, el autor comparte una experiencia personal y enfatiza la importancia de pelear nuestras batallas y acercarnos confiadamente al trono de la gracia.


Gregory Bishop
Cuando Dios no hace lo que queremos
En estos tres sermones se habla sobre la confianza en Dios y cómo debemos estar dispuestos a aceptar su plan, aunque a veces nos escandalice o no lo entendamos completamente. Se mencionan ejemplos de la Biblia y se invita a los oyentes a someterse a la voluntad de Dios y confiar en su sabiduría, para que puedan experimentar la paz y el poder en sus vidas.


Génesis 38:30 - Referencia Cruzada

De los hijos de Zera: Jeuel y sus parientes: 690 de ellos. (1 Crónicas 9:6)
Judá fue padre de Fares y de Zara, cuya madre fue Tamar; Fares fue padre de Esrom, y Esrom de Aram; (Mateo 1:3)
Tamar, su nuera, dio a luz a Pérez y a Zera. Judá tuvo cinco hijos en total. (1 Crónicas 2:4)