Entonces ella se levantó y se fue. Se quitó el velo y se puso sus ropas de viuda.
(Génesis 38:19)Cuando Judá envió el cabrito por medio de su amigo el Adulamita, para recobrar la prenda de mano de la mujer, no la halló.
(Génesis 38:20)Y preguntó a los hombres del lugar: "¿Dónde está la ramera que estaba en Enaim, junto al camino?" "Aquí no ha habido ninguna ramera," dijeron ellos.
(Génesis 38:21)El volvió donde Judá, y le dijo: "No la encontré. Además, los hombres del lugar dijeron: 'Aquí no ha habido ninguna ramera.'"
Entonces Judá dijo: "Que se quede con las prendas, para que no seamos causa de burla. Ya ves que envié este cabrito, y tú no la has encontrado."
(Génesis 38:23)Y a los tres meses, informaron a Judá, diciendo: "Tu nuera Tamar ha fornicado, y ha quedado encinta a causa de las fornicaciones." "Sáquenla y que sea quemada," dijo Judá.
(Génesis 38:24)Cuando la sacaban, ella envió a decir a su suegro: "Del hombre a quien pertenecen estas cosas estoy encinta." "Le ruego que examine y vea de quién es este sello, este cordón y este báculo," añadió ella.
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Génesis 38:22 - Referencia Cruzada