El aceite de la viuda
Dr. Roberto Miranda
(Audio: Español)
RESUMEN: El pasaje de 2 Reyes 4 nos habla de la importancia de la fe y cómo esta es el combustible que mueve el vehículo de Dios. Es necesario activar nuestra fe para que las promesas de Dios se hagan realidad en nuestra vida. La fe requiere una actitud de clamor, de pedirle a Dios con urgencia y determinación. La historia de la viuda que clama a Eliseo nos enseña que Dios provee en medio de nuestras necesidades y que debemos ser específicos al pedirle a Dios lo que necesitamos. La vida nos demanda constantemente y los acreedores representan esa parte dura de la existencia humana, pero Dios es fiel y provee en medio de nuestras necesidades. Todo en la vida cuesta algo, pero la fe es el combustible que nos mueve hacia las promesas de Dios.
En la vida, siempre habrá problemas y demandas de diferentes tipos, y es importante saber cómo reaccionar ante ellos. En lugar de lamentarse y quejarse, es importante ir a la fuente del poder y clamar a Dios por ayuda. Es necesario ser específico al presentar nuestras necesidades y ser proactivos en la oración diaria. Además, Dios siempre quiere que pongamos algo en el milagro y que seamos parte del proceso. Por lo tanto, es importante que hagamos esfuerzos y trabajemos duro para lograr nuestras metas, en lugar de depender de la suerte o de la ayuda de los demás.
Este sermón del Dr. Roberto Miranda se enfoca en la importancia de tomar acción en la fe para que Dios pueda obrar milagros en nuestra vida. Dios siempre necesita algo de nosotros, una base humana para entrar en el mundo del tiempo y del espacio. Incluso cuando nos sentimos incapaces de hacer algo, es importante reconocer que hay algo que podemos contribuir y ofrecer a Dios. Debemos convertirnos en personas de acción en nuestra vida, pero esa acción debe ser disciplinada y en fe. Debemos hacer lo que podamos hacer y luego descansar en la certeza de que Dios hará su parte. Dios tiene nuestro milagro y solución, y debemos creer en él y caminar en fe, tomando acciones de fe para ver su obra en nuestras vidas.
En la vida, siempre habrá problemas y demandas de diferentes tipos, y es importante saber cómo reaccionar ante ellos. En lugar de lamentarse y quejarse, es importante ir a la fuente del poder y clamar a Dios por ayuda. Es necesario ser específico al presentar nuestras necesidades y ser proactivos en la oración diaria. Además, Dios siempre quiere que pongamos algo en el milagro y que seamos parte del proceso. Por lo tanto, es importante que hagamos esfuerzos y trabajemos duro para lograr nuestras metas, en lugar de depender de la suerte o de la ayuda de los demás.
Este sermón del Dr. Roberto Miranda se enfoca en la importancia de tomar acción en la fe para que Dios pueda obrar milagros en nuestra vida. Dios siempre necesita algo de nosotros, una base humana para entrar en el mundo del tiempo y del espacio. Incluso cuando nos sentimos incapaces de hacer algo, es importante reconocer que hay algo que podemos contribuir y ofrecer a Dios. Debemos convertirnos en personas de acción en nuestra vida, pero esa acción debe ser disciplinada y en fe. Debemos hacer lo que podamos hacer y luego descansar en la certeza de que Dios hará su parte. Dios tiene nuestro milagro y solución, y debemos creer en él y caminar en fe, tomando acciones de fe para ver su obra en nuestras vidas.
Segundo de Reyes, Capítulo 4. Hablando de Fe, hablando del Dios proveedor. El Señor impresionó mi espíritu con este pasaje. Precisamente esta mañana mientras oraba a Dios para buscar su bendición en el servicio de hoy y coincide muy bien con los temas que hemos estado tratando, que es el tema de la Fe este año.
Por lo menos mis sermones y yo sé que mis hermanos Pastores -que han estado predicando también- han estado encajando en este tema de Fe. Porque este es un año de Fe, este es un año para creerle al Señor, para saber que Dios es más poderoso que las circunstancias, que Dios es más poderoso aún que nuestra incapacidad, nuestros errores, nuestros defectos, nuestros pecados. La Fe vence, la Fe hace que se muevan montañas, la Fe quita los obstáculos, la Fe es la gasolina que hace posible el mover el vehículo del hijo o la hija de Dios.
Por lo menos mis sermones y yo sé que mis hermanos Pastores -que han estado predicando también- han estado encajando en este tema de Fe. Porque este es un año de Fe, este es un año para creerle al Señor, para saber que Dios es más poderoso que las circunstancias, que Dios es más poderoso aún que nuestra incapacidad, nuestros errores, nuestros defectos, nuestros pecados. La Fe vence, la Fe hace que se muevan montañas, la Fe quita los obstáculos, la Fe es la gasolina que hace posible el mover el vehículo del hijo o la hija de Dios.
