El cetro de la maldad no permanecerá en la tierra dada al justo
Dr. Roberto MirandaComo hemos comprobado tan gráficamente esta semana, la maldad existe en este mundo. Pero Dios también le ha puesto un límite. Tan solo se puede manifestar por un momento, pero luego tiene que cederle el espacio a un Poder más Alto y Noble, quien a final de cuentas tiene todo el control.
Somos gente de fe. Creemos en un Dios benévolo que sostiene con una mano estable la historia; quien aunque permite que el odio y el fanatismo tengan su momento, también ha declarado una y otra vez, a través de las muchas voces de fe en este milenio, que al final, el bien prevalecerá; que, si, “el llanto podría permanecer por la noche, pero el gozo viene en le mañana” (Salmo 30:50).