El Dios de pactos
Mercedes López-Miranda(Audio: Español)
RESUMEN:
El ponente habla sobre el Dios de pactos y cómo la Biblia es un registro de los pactos que Dios ha hecho con su pueblo a lo largo de la historia. El primer pacto registrado en la Biblia es el que Dios hizo con Noé para salvarlo del diluvio. Otros ejemplos de pactos incluyen los que hizo con Abraham, Moisés y David. También se habla de pactos entre dos personas, como el de Jonatán y David y el de Ruth y Noemí. El ponente enumera cuatro características de las relaciones basadas en el pacto: se inician para el beneficio del otro, se establecen sobre promesas incondicionales, se basan en el amor ágape y son compromisos permanentes. Dios es un Dios de pactos y los creyentes son llamados a establecer relaciones de pacto en sus propias vidas.
En este sermón se habla de la importancia de la mentalidad de pacto en las relaciones humanas, en contraposición a la mentalidad de contrato que impera en nuestra cultura. Se explica que Dios es un Dios de pactos y que aquellos con los que él establece pactos también son llamados a establecer relaciones de pacto en su vida. Una mentalidad de pacto incluye el beneficio del otro, hacer cosas por el beneficio del otro, en promesas incondicionales, en el amor práctico, ágape, y en el compromiso permanente. En cambio, una mentalidad de contrato se basa en qué provecho puedo sacar de esta relación y en mi derecho de terminar el acuerdo si yo considero que el otro no está cumpliendo con su parte. El sermón enfatiza la importancia del matrimonio como una relación de pacto, y que el propósito principal del matrimonio es dar testimonio de su amor en la tierra. También se habla de la importancia de transmitir la mentalidad de pacto a las generaciones futuras a través de la familia.
La mentalidad de pacto es fundamental para nuestras relaciones y para transmitirla a las futuras generaciones. Nuestro hogar debe ser un hogar de pacto, donde enseñamos a nuestros hijos esta mentalidad. Debemos comprometernos permanentemente y establecer relaciones incondicionales. Debemos aprender a amar como Cristo amó y persistir en relaciones difíciles. La importancia de nuestras relaciones en el aquí y ahora no debe subestimarse, ya que pueden tener un impacto en las presentes y futuras generaciones. Al entrar en pacto con Dios, Él se compromete con nosotros para siempre. Debe haber una conciencia del pacto en todas nuestras relaciones. Dios hace memoria de su pacto perpetuamente y de la palabra que mandó para mil generaciones. Bendecimos a todas las relaciones en nuestras vidas y pedimos la sanidad de nuestras relaciones y de nuestra tierra.Esta mañana yo voy a compartir acerca del Dios de pactos. ¿Cuántos de ustedes se les movió el corazón y el espíritu cuando cantaban Dios de pactos hace un ratito? Que bello, ¿verdad? Nuestro es tan precioso. Es un Dios verdaderamente de pactos. Desde el principio que él creó el ser humano, él nos creó no como piensan algunos para estar en el cielo como un juez, serio, acusador, punitivo, sino todo lo contrario. El plan de Dios para la humanidad, la razón por la cual él creó a la humanidad es para sustentarle y amarle todos los días. Y eso es no solamente para los que él creó al principio sino que es para nosotros hoy, y es para todo el resto de la humanidad que queda por delante.
La Biblia en realidad es un registro de los pactos de Dios con su pueblo. Y es muy interesante que la palabra pacto ocurre en toda la Biblia de Génesis a Apocalipsis, ocurre 300 veces, o sea, lo que es palabra específicamente pacto, también hay otras palabras como juramento, promesa que quieren decir algo similar, pero la palabra pacto es una palabra importante para el Señor y está registrada ahí en muchas maneras.