Descanso para el alma
Alberto González MuñozUn gran problema humano contemporáneo es el cansancio. "Qué cansado o cansada estoy" repiten muchas personas todos los días. Otros simplemente dicen: "No aguanto más" y hay otra frase que escuchamos con frecuencia: "Que va, así, no hay quien pueda".
Todas estas expresiones denotan que quien las dice está al borde de sus fuerzas. El cansancio más grave no es el físico. Por más extenuada que esté una persona, una noche de sueño, o a veces simplemente un buen baño nos hacen sentir como nuevos. Hay otro cansancio que no desaparece tan fácilmente. Se acumula un día tras otro y al despertar cada mañana nos parece que tenemos por delante una montaña inaccesible, imposible de escalar. ¿Te has sentido alguna vez así?