Hoy me has arrojado de la superficie de la tierra, y de Tu presencia me esconderé, y seré vagabundo y errante en la tierra. Y sucederá que cualquiera que me halle me matará."
(Genesis 4:14)
Entonces el SEÑOR le dijo: "No será así, pues cualquiera que mate a Caín, siete veces sufrirá venganza." Y el SEÑOR puso una señal sobre Caín, para que cualquiera que lo hallara no lo matara.
(Genesis 4:15)
Y salió Caín de la presencia del SEÑOR, y se estableció (habitó) en la tierra de Nod, al oriente del Edén.
(Genesis 4:16)
Y conoció Caín a su mujer, y ella concibió y dio a luz a Enoc. Caín edificó una ciudad y la llamó Enoc, como el nombre de su hijo.
A Enoc le nació Irad. Irad fue padre de Mehujael, Mehujael fue padre de Metusael, y Metusael fue padre de Lamec.
(Genesis 4:18)
Lamec tomó para sí dos mujeres. El nombre de una era Ada, y el nombre de la otra, Zila.
(Genesis 4:19)
Y Ada dio a luz a Jabal, el cual fue padre de los que habitan en tiendas y tienen ganado.
(Genesis 4:20)
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Genesis 4:17 - Cross Reference
Fue lo mismo que ocurrió en los días de Lot: comían, bebían, compraban, vendían, plantaban, construían;
(Luke 17:28)
Enoc anduvo con Dios 300 años después de haber engendrado a Matusalén, y tuvo otros hijos e hijas.
(Genesis 5:22)
Luego dijeron: "Vamos, edifiquémonos una ciudad y una torre cuya cúspide llegue hasta los cielos, y hagámonos un nombre famoso , para que no seamos dispersados sobre la superficie de toda la tierra."
(Genesis 11:4)
Jared vivió 162 años, y fue padre de Enoc.
(Genesis 5:18)
Engrandecí mis obras, me edifiqué casas, me planté viñas;
(Ecclesiastes 2:4)
el rey reflexionó, y dijo: "¿No es ésta la gran Babilonia que yo he edificado como residencia real con la fuerza de mi poder y para gloria de mi majestad?"
(Daniel 4:30)
En vida, Absalón había tomado y erigido para sí una columna que está en el Valle del Rey, pues se había dicho: "No tengo hijo para perpetuar mi nombre." Y llamó la columna por su propio nombre, y hasta hoy día se llama Monumento de Absalón.
(2 Samuel 18:18)
Su íntimo pensamiento es que sus casas serán eternas, Y sus moradas por todas las generaciones; A sus tierras han dado sus nombres.
(Psalm 49:11)