Nueva Biblia Latinoamericana
El asta de su lanza era como un rodillo de telar y la punta de su lanza pesaba 600 siclos (6.84 kilos) de hierro; y su escudero iba delante de él. (1 Samuel 17:7)
Goliat se paró y gritó a las filas de Israel: "¿Para qué han salido a ponerse en orden de batalla? ¿Acaso no soy yo Filisteo y ustedes siervos de Saúl? Escojan un hombre y que venga contra mí. (1 Samuel 17:8)
Si es capaz de pelear conmigo y matarme, entonces seremos sus siervos; pero si yo lo venzo y lo mato, entonces ustedes serán nuestros siervos y nos servirán." (1 Samuel 17:9)
De nuevo el Filisteo dijo: "Hoy desafío a las filas de Israel. Denme un hombre para que luchemos mano a mano."
Cuando Saúl y todo Israel oyeron estas palabras del Filisteo, se acobardaron y tuvieron gran temor. (1 Samuel 17:11)
David era hijo del Efrateo de Belén (Casa del Pan) de Judá, llamado Isaí, y éste tenía ocho hijos. En los días de Saúl, Isaí ya era viejo, avanzado en años entre los hombres. (1 Samuel 17:12)
Los tres hijos mayores de Isaí habían ido con Saúl a la guerra. Los nombres de los tres hijos que fueron a la guerra eran: Eliab, el primogénito, Abinadab, el segundo, y Sama, el tercero. (1 Samuel 17:13)

Other publications related to "1 Samuel 17:10":

Isaías Rivera
The King has sent His chariot to look for you
The story of King David and Mefi-bosheth teaches us about the importance of recognition and value beyond external circumstances, and how God is always seeking to protect and care for us.


Samuel Acevedo
Confronting our giants
The article discusses the importance of confronting our fears and obstacles, using the story of David and Goliath as an example of how God can help us overcome them. The author shares personal anecdotes and offers advice on keeping a journal and celebrating victories. Victory can be achieved with faith in God.


1 Samuel 17:10 - Cross Reference

¿Acaso tienes tú un brazo como el de Dios, Y truenas con una voz como la suya? (Job 40:9)
Y los hombres de Israel decían: "¿Han visto a ese hombre que sube? Ciertamente sube para desafiar a Israel. El rey colmará con grandes riquezas al que lo mate, le dará su hija y hará libre en Israel a la casa de su padre." (1 Samuel 17:25)
Delante de la destrucción va el orgullo, Y delante de la caída, la arrogancia de espíritu. (Proverbs 16:18)
Y después de él, Eleazar, hijo de Dodo el Ahohíta, uno de los tres valientes que estaban con David cuando desafiaron a los Filisteos que se habían reunido allí para la batalla y se habían retirado los hombres de Israel. (2 Samuel 23:9)
Porque Tú has mantenido mi derecho y mi causa; Te sientas en el trono juzgando con justicia. (Psalm 9:4)
Su siervo ha matado tanto al león como al oso; y este Filisteo incircunciso será como uno de ellos, porque ha desafiado a los escuadrones del Dios viviente." (1 Samuel 17:36)
Pero cuando se enteraron Sanbalat el Horonita, Tobías el oficial Amonita y Gesem el Arabe, se burlaron de nosotros, nos despreciaron y dijeron: "¿Qué es esto que están haciendo? ¿Se están rebelando contra el rey?" (Nehemiah 2:19)
Ahora yo, Nabucodonosor, alabo, ensalzo y glorifico al Rey del cielo, porque Sus obras son todas verdaderas y justos Sus caminos. El puede humillar a los que caminan con soberbia." (Daniel 4:37)
Y comenzó su discurso (parábola), y dijo: "Desde Aram me ha traído Balac, Rey de Moab, desde los montes del oriente: 'Ven, y maldíceme a Jacob; Ven, y condena a Israel.' (Numbers 23:7)
Cuando desafió a Israel, lo mató Jonatán, hijo de Simea, hermano de David. (2 Samuel 21:21)
Así dice el SEÑOR: "No se gloríe el sabio de su sabiduría, Ni se gloríe el poderoso de su poder, Ni el rico se gloríe de su riqueza; (Jeremiah 9:23)
Entonces dijo David al Filisteo: "Tú vienes a mí con espada, lanza y jabalina, pero yo vengo a ti en el nombre del SEÑOR de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has desafiado. (1 Samuel 17:45)