Nueva Biblia Latinoamericana
a Abraham en propiedad a la vista de los hijos de Het, delante de todos los que entraban por la puerta de su ciudad. (Genesis 23:18)
Después de esto, Abraham sepultó a Sara su mujer en la cueva del campo de Macpela frente a Mamre, es decir, Hebrón, en la tierra de Canaán. (Genesis 23:19)
El campo y la cueva que hay en él fueron cedidos a Abraham en posesión para una sepultura por los hijos de Het. (Genesis 23:20)
Abraham era viejo, entrado en años; y el SEÑOR había bendecido a Abraham en todo.
Y Abraham dijo a su siervo, el más viejo de su casa, que era mayordomo de todo lo que poseía: "Te ruego que pongas tu mano debajo de mi muslo, (Genesis 24:2)
y te haré jurar por el SEÑOR, Dios de los cielos y Dios de la tierra, que no tomarás mujer para mi hijo de las hijas de los Cananeos, entre los cuales yo habito, (Genesis 24:3)
sino que irás a mi tierra y a mis parientes, y tomarás mujer para mi hijo Isaac." (Genesis 24:4)

Other publications related to "Genesis 24:1":

Gregory Bishop
A journey of spiritual growth
Learn about Abrahams journey of spiritual growth and lessons on faith and trust in Gods promises.


Dr. Roberto Miranda
God always keeps what he promises
Dr. Roberto Miranda discusses how Abrahams faith in Gods promises led to his blessings and how trusting in God can lead to fulfillment of promises.


Genesis 24:1 - Cross Reference

No tenían hijos, porque Elisabet era estéril, y ambos eran de edad avanzada. (Luke 1:7)
Abram era muy rico en ganado, en plata y en oro. (Genesis 13:2)
Miren a Abraham, su padre, Y a Sara, que los dio a luz. Cuando él era uno solo lo llamé, Y lo bendije y lo multipliqué." (Isaiah 51:2)
Abraham y Sara eran ancianos, entrados en años. Y a Sara le había cesado ya la costumbre de las mujeres. (Genesis 18:11)
Y el SEÑOR ha bendecido en gran manera a mi señor, que se ha enriquecido. Le ha dado ovejas y vacas, plata y oro, siervos y siervas, camellos y asnos. (Genesis 24:35)
Pero busquen primero Su reino y Su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas. (Matthew 6:33)
Haré de ti una nación grande, Y te bendeciré, Engrandeceré tu nombre, Y serás bendición. (Genesis 12:2)
El rey David ya era muy anciano, entrado en días; lo cubrían de ropas pero no entraba en calor. (1 Kings 1:1)
La bendición del SEÑOR es la que enriquece, Y El no añade tristeza con ella. (Proverbs 10:22)
Abraham tenía cien años cuando le nació su hijo Isaac. (Genesis 21:5)
Bendito sea el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos ha bendecido con toda bendición espiritual en los lugares celestiales en Cristo. (Ephesians 1:3)
¡Aleluya! Cuán bienaventurado es el hombre que teme al SEÑOR, Que mucho se deleita en Sus mandamientos. (Psalm 112:1)
Por el Dios de tu padre que te ayuda, Y por el Todopoderoso que te bendice Con bendiciones de los cielos de arriba, Bendiciones del abismo que está abajo, Bendiciones de los pechos y del seno materno. (Genesis 49:25)
Tenía Isaac cuarenta años cuando tomó por mujer a Rebeca, hija de Betuel, el Arameo de Padán Aram, hermana de Labán el Arameo. (Genesis 25:20)
Así que, los que son de la fe son bendecidos con Abraham, el creyente. (Galatians 3:9)
Porque el ejercicio físico aprovecha poco, pero la piedad es provechosa para todo, pues tiene promesa para la vida presente y también para la futura. (1 Timothy 4:8)