Ninguno tomará en prenda el molino de mano ni la muela del molino (piedra de moler), porque sería tomar en prenda la vida del hombre. (Deuteronomy 24:6)

Si se encuentra a un hombre que haya secuestrado a alguien de sus hermanos de los Israelitas, y lo haya tratado con violencia, o lo haya vendido, entonces ese ladrón morirá. Así quitarás el mal de en medio de ti. (Deuteronomy 24:7)

Cuídate de una infección de lepra, para que observes diligentemente y hagas conforme a todo lo que los sacerdotes Levitas les enseñen. Como les he ordenado, así cuidarán de hacer. (Deuteronomy 24:8)

Recuerda lo que el SEÑOR tu Dios hizo a Miriam en el camino, cuando ustedes salían de Egipto.

Cuando prestes cualquier cosa a tu prójimo, no entrarás en su casa para tomar su prenda. (Deuteronomy 24:10)

Tú te quedarás afuera, y el hombre a quien hiciste el préstamo te traerá la prenda. (Deuteronomy 24:11)

Si él es un hombre pobre, no te acostarás reteniendo aún su prenda. (Deuteronomy 24:12)

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Deuteronomy 24:9 - Cross Reference

Manda a los Israelitas que echen del campamento a todo leproso, a todo el que padece de flujo y a todo el que es inmundo por causa de un muerto. (Numbers 5:2)

Estas cosas sucedieron como ejemplo para nosotros, a fin de que no codiciemos lo malo, como ellos lo codiciaron. (1 Corinthians 10:6)

Y el sumo sacerdote Azarías y todos los sacerdotes lo miraron, y él tenía lepra en la frente; y lo hicieron salir de allí a toda prisa, y también él mismo se apresuró a salir, porque el SEÑOR lo había herido. (2 Chronicles 26:20)

Había cuatro leprosos a la entrada de la puerta, y se dijeron el uno al otro: "¿Por qué estamos aquí sentados esperando la muerte? (2 Kings 7:3)

Pero cuando la nube se retiró de sobre la tienda, vieron que Miriam estaba leprosa, blanca como la nieve. Y cuando Aarón se volvió hacia Miriam, vio que estaba leprosa. (Numbers 12:10)

Acuérdense de la mujer de Lot. (Luke 17:32)

Estas cosas les sucedieron como ejemplo, y fueron escritas como enseñanza para nosotros, para quienes ha llegado el fin de los siglos. (1 Corinthians 10:11)