Nueva Biblia Latinoamericana
No sea que digas en tu corazón: 'Mi poder y la fuerza de mi mano me han producido esta riqueza.' (Deuteronomy 8:17)
Pero acuérdate del SEÑOR tu Dios, porque El es el que te da poder para hacer riquezas, a fin de confirmar Su pacto, el cual juró a tus padres como en este día. (Deuteronomy 8:18)
Pero sucederá que si alguna vez te olvidas del SEÑOR tu Dios, y vas en pos de otros dioses, y los sirves y los adoras, yo testifico contra ustedes hoy, que ciertamente perecerán. (Deuteronomy 8:19)
Como las naciones que el SEÑOR destruye delante de ustedes, así perecerán ustedes, porque no oyeron la voz del SEÑOR su Dios.
Oye, Israel: Hoy vas a pasar el Jordán para entrar a desposeer a naciones más grandes y más poderosas que tú, ciudades grandes y fortificadas hasta el cielo, (Deuteronomy 9:1)
un pueblo grande y alto, los hijos de los Anaceos, a quienes conoces y de quienes has oído decir: '¿Quién puede resistir ante los hijos de Anac?' (Deuteronomy 9:2)
Comprende, pues, hoy, que es el SEÑOR tu Dios el que pasa delante de ti como fuego consumidor. El los destruirá y los humillará delante de ti, para que los expulses y los destruyas rápidamente, tal como el SEÑOR te ha dicho. (Deuteronomy 9:3)

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Deuteronomy 8:20 - Cross Reference

Ciertamente todo Israel ha transgredido Tu ley y se ha apartado, sin querer obedecer Tu voz. Por eso ha sido derramada sobre nosotros la maldición y el juramento que está escrito en la ley de Moisés, siervo de Dios, porque hemos pecado contra El. (Daniel 9:11)
Pero ellos continuamente se burlaban de los mensajeros de Dios, despreciaban Sus palabras y se burlaban de Sus profetas, hasta que subió el furor del SEÑOR contra Su pueblo, y ya no hubo remedio. (2 Chronicles 36:16)