Nueva Biblia Latinoamericana
Estará contigo como jornalero, como si fuera un peregrino; él servirá contigo hasta el año de jubileo. (Leviticus 25:40)
Entonces saldrá libre de ti, él y sus hijos con él, y volverá a su familia, para que pueda regresar a la propiedad de sus padres. (Leviticus 25:41)
Porque ellos son Mis siervos, los cuales saqué de la tierra de Egipto; no serán vendidos en venta de esclavos. (Leviticus 25:42)
No te enseñorearás de él con severidad, más bien, teme a tu Dios.
En cuanto a los esclavos y esclavas que puedes tener de las naciones paganas que los rodean, de ellos podrán adquirir esclavos y esclavas. (Leviticus 25:44)
También podrán adquirirlos de los hijos de los extranjeros que residen con ustedes, y de sus familias que están con ustedes, que hayan sido engendradas en su tierra; éstos también pueden ser posesión de ustedes. (Leviticus 25:45)
Aun podrán dejarlos en herencia a sus hijos después de ustedes, como posesión; podrán servirse de ellos como esclavos para siempre. Pero en cuanto a sus hermanos, los Israelitas, no se enseñorearán unos de otros con severidad. (Leviticus 25:46)

Other publications related to "Leviticus 25:43":

Dr. Roberto Miranda
God might receive us as slaves but treats us as sons
In this article, Dr. Roberto Miranda discusses how God treats us as sons despite our true condition as servants of Christ. He uses the example of Pauls letter to Philemon to illustrate this duality and encourages listeners to approach Gods throne with gratitude.


Charles Spurgeon
We don't need to be captives
In this article by Charles Spurgeon, we learn how Gods people can find forgiveness and deliverance from captivity through confessing sin and obeying God. By abandoning idols and returning to God, depression and despondency can be removed. Discover how we can quickly return to the citizenship of Zion.


Leviticus 25:43 - Cross Reference

Y el SEÑOR dijo: "Ciertamente he visto la aflicción de Mi pueblo que está en Egipto, y he escuchado su clamor a causa de sus capataces, pues estoy consciente de sus sufrimientos. (Exodus 3:7)
Dicen: '¿Por qué hemos ayunado, y Tú no lo ves? ¿Por qué nos hemos humillado, y Tú no haces caso?' Pero en el día de su ayuno buscan su conveniencia Y oprimen a todos sus trabajadores. (Isaiah 58:3)
Estaba enojado contra Mi pueblo, Profané Mi heredad Y en tu mano los entregué. No les mostraste compasión, Sobre el anciano hiciste muy pesado tu yugo, (Isaiah 47:6)
Y ustedes, amos, hagan lo mismo con sus siervos, y dejen las amenazas, sabiendo que el Señor de ellos y de ustedes está en los cielos, y que para El no hay acepción de personas. (Ephesians 6:9)
Me acercaré a ustedes para el juicio, y seré un testigo veloz contra los hechiceros, contra los adúlteros, contra los que juran en falso y contra los que oprimen al jornalero en su salario, a la viuda y al huérfano, contra los que niegan el derecho del extranjero y los que no Me temen," dice el SEÑOR de los ejércitos. (Malachi 3:5)
Pero las parteras temían (reverenciaban) a Dios, y no hicieron como el rey de Egipto les había mandado, sino que dejaron con vida a los niños. (Exodus 1:17)
Y ahora, el clamor de los Israelitas ha llegado hasta Mí, y además he visto la opresión con que los Egipcios los oprimen. (Exodus 3:9)
Lo tratará como quien trabaja a jornal año por año; no se enseñoreará de él con severidad delante de sus ojos. (Leviticus 25:53)
Pasado mucho tiempo, murió el rey de Egipto. Los Israelitas gemían a causa de la servidumbre, y clamaron. Su clamor subió a Dios, a causa de su servidumbre. (Exodus 2:23)
Ustedes no han fortalecido a las débiles, no han curado a la enferma, no han vendado a la herida, no han hecho volver a la descarriada, no han buscado a la perdida; sino que las han dominado con dureza y con severidad. (Ezekiel 34:4)
Los Egipcios, pues, obligaron a los Israelitas a trabajar duramente, (Exodus 1:13)
Amos, traten con justicia y equidad a sus siervos, sabiendo que ustedes también tienen un Señor en el cielo. (Colossians 4:1)
cómo te salió al encuentro en el camino, y atacó entre los tuyos a todos los agotados en tu retaguardia cuando tú estabas fatigado y cansado; y él no temió (reverenció) a Dios. (Deuteronomy 25:18)
Y por haber las parteras temido a Dios, El prosperó sus familias. (Exodus 1:21)
Aun podrán dejarlos en herencia a sus hijos después de ustedes, como posesión; podrán servirse de ellos como esclavos para siempre. Pero en cuanto a sus hermanos, los Israelitas, no se enseñorearán unos de otros con severidad. (Leviticus 25:46)
Así que no se hagan mal uno a otro, sino teman (reverencien) a su Dios; porque Yo soy el SEÑOR su Dios. (Leviticus 25:17)
Y azotaban a los jefes de los Israelitas que los capataces de Faraón habían puesto sobre ellos, diciéndoles: "¿Por qué no han terminado, ni ayer ni hoy, la cantidad de ladrillos requerida como antes?" (Exodus 5:14)