Clamaban a gran voz: "La salvación pertenece a nuestro Dios que está sentado en el trono, y al Cordero."
(Revelation 7:10)Todos los ángeles estaban de pie alrededor del trono y alrededor de los ancianos y de los cuatro seres vivientes. Estos cayeron sobre sus rostros delante del trono y adoraron a Dios,
(Revelation 7:11)diciendo: "¡Amén! La bendición, la gloria, la sabiduría, la acción de gracias, el honor, el poder y la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén."
(Revelation 7:12)Uno de los ancianos habló diciéndome: "Estos que están vestidos con vestiduras blancas, ¿quiénes son y de dónde han venido?"
Y le respondí: "Señor mío, usted lo sabe." Y él me dijo: "Estos son los que vienen de la gran tribulación, y han lavado sus vestiduras y las han emblanquecido en la sangre del Cordero.
(Revelation 7:14)Por eso están delante del trono de Dios, y Le sirven día y noche en Su templo; y Aquél que está sentado en el trono extenderá Su tabernáculo sobre ellos.
(Revelation 7:15)Ya no tendrán hambre ni sed, ni el sol les hará daño, ni ningún calor abrasador,
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Revelation 7:13 - Cross Reference
Y alrededor del trono había veinticuatro tronos. Y sentados en los tronos, veinticuatro ancianos vestidos de ropas blancas, con coronas de oro en la cabeza.
(Revelation 4:4)Jesús entonces, mientras enseñaba en el templo, exclamó en alta voz: "Ustedes Me conocen y saben de dónde soy. Yo no he venido por decisión propia, pero Aquél que Me envió es verdadero, a quien ustedes no conocen.
(John 7:28)Después de esto miré, y vi una gran multitud, que nadie podía contar, de todas las naciones, tribus, pueblos, y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en las manos.
(Revelation 7:9)los veinticuatro ancianos se postran delante de Aquél que está sentado en el trono, y adoran a Aquél que vive por los siglos de los siglos, y echan sus coronas delante del trono, diciendo:
(Revelation 4:10)y le dijo: "Agar, sierva de Sarai, ¿de dónde has venido y a dónde vas?" Ella le respondió: "Huyo de la presencia de mi señora Sarai."
(Genesis 16:8)La mujer fue y se lo dijo a su marido: "Un hombre de Dios vino a mí, y su aspecto era como el aspecto del ángel de Dios, muy imponente. Yo no le pregunté de dónde venía, ni él me hizo saber su nombre.
(Judges 13:6)Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono y de los seres vivientes y de los ancianos. El número de ellos era miríadas de miríadas, y millares de millares,
(Revelation 5:11)Entonces uno de los ancianos me dijo: "No llores; mira, el León de la tribu de Judá, la Raíz de David, ha vencido para abrir el libro y sus siete sellos."
(Revelation 5:5)