Hermanos míos, que no se hagan maestros muchos de ustedes , sabiendo que recibiremos un juicio más severo (mayor condenación). (James 3:1)

Porque todos fallamos (ofendemos) de muchas maneras. Si alguien no falla en lo que dice, es un hombre perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo. (James 3:2)

Ahora bien, si ponemos el freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, dirigimos también todo su cuerpo. (James 3:3)

Miren también las naves; aunque son tan grandes e impulsadas por fuertes vientos, son, sin embargo, dirigidas mediante un timón muy pequeño por donde la voluntad del piloto quiere.

Así también la lengua es un miembro pequeño, y sin embargo, se jacta de grandes cosas. ¡Pues qué gran bosque se incendia con tan pequeño fuego! (James 3:5)

También la lengua es un fuego, un mundo de iniquidad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, la cual contamina todo el cuerpo, es encendida por el infierno e inflama el curso de nuestra vida. (James 3:6)

Porque toda clase de fieras y de aves, de reptiles y de animales marinos, se puede domar y ha sido domado por el ser humano, (James 3:7)

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James 3:4 - Cross Reference

Pues El habló, y levantó un viento tempestuoso Que encrespó las olas del mar. (Psalm 107:25)

Y de pronto se desató una gran tormenta en el mar de Galilea, de modo que las olas cubrían la barca; pero Jesús estaba dormido. (Matthew 8:24)

Pero el SEÑOR desató sobre el mar un fuerte viento, y hubo una tempestad tan grande en el mar que el barco estuvo a punto de romperse. (Jonah 1:4)

Pero no mucho después, desde tierra comenzó a soplar un viento huracanado que se llama Euroclidón (viento del nordeste), (Acts 27:14)