Nueva Biblia Latinoamericana
Porque convenía que tuviéramos tal Sumo Sacerdote: santo, inocente, inmaculado, apartado de los pecadores, y exaltado más allá de los cielos, (Hebrews 7:26)
que no necesita, como aquellos sumos sacerdotes, ofrecer sacrificios diariamente, primero por sus propios pecados y después por los pecados del pueblo. Porque esto Jesús lo hizo una vez para siempre, cuando El mismo se ofreció. (Hebrews 7:27)
Porque la Ley designa como sumos sacerdotes a hombres débiles, pero la palabra del juramento, que vino después de la Ley, designa al Hijo, hecho perfecto para siempre. (Hebrews 7:28)
Ahora bien, el punto principal de lo que se ha dicho es éste: tenemos tal Sumo Sacerdote, que se ha sentado a la diestra del trono de la Majestad en los cielos,
como ministro del santuario y del tabernáculo verdadero, que el Señor erigió, no el hombre. (Hebrews 8:2)
Porque todo sumo sacerdote está constituido para presentar ofrendas y sacrificios, por lo cual es necesario que este Sumo Sacerdote también tenga algo que ofrecer. (Hebrews 8:3)
Así que si El estuviera sobre la tierra, ni siquiera sería sacerdote, habiendo sacerdotes que presentan las ofrendas según la Ley; (Hebrews 8:4)

Other publications related to "Hebrews 8:1":

Do you have access to God?
The author discusses the book of Hebrews and how it relates to the struggle with sin and the need for a mediator between God and man. The passage encourages Christians to approach the throne of grace with confidence to receive mercy and find grace to help in times of need.


Dr. Roberto Miranda
Leave the camp and bear the reproach of Christ
The article discusses the comparison between the altar of Christ and the altar of the tabernacle in the Old Testament. It emphasizes the significance of the sacrifice of Christ and encourages believers to live a worthy life outside the camp, bearing the reproach of Christ.


Hebrews 8:1 - Cross Reference

Prepara Tu espada sobre el muslo, oh valiente, En Tu esplendor y Tu majestad. (Psalm 45:3)
Salmo de David. Dice el SEÑOR a mi Señor: "Siéntate a Mi diestra, Hasta que ponga a Tus enemigos por estrado de Tus pies." (Psalm 110:1)
Ellos alzan sus voces, gritan de júbilo. Desde el occidente dan voces por la majestad del SEÑOR. (Isaiah 24:14)
Grande es su gloria por Tu salvación, Esplendor y majestad has puesto sobre él. (Psalm 21:5)
Pero, ¿a cuál de los ángeles jamás ha dicho Dios: "SIENTATE A MI DIESTRA HASTA QUE PONGA A TUS ENEMIGOS POR ESTRADO DE TUS PIES?" (Hebrews 1:13)
Para dar a conocer a los hijos de los hombres Tus hechos poderosos Y la gloria de la majestad de Tu reino. (Psalm 145:12)
Si ustedes, pues, han resucitado con Cristo, busquen las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. (Colossians 3:1)
Porque convenía que tuviéramos tal Sumo Sacerdote: santo, inocente, inmaculado, apartado de los pecadores, y exaltado más allá de los cielos, (Hebrews 7:26)
por el cual soy embajador en cadenas; que al proclamar lo hable sin temor, como debo hablar. (Ephesians 6:20)
El es el resplandor de Su gloria y la expresión (representación) exacta de Su naturaleza, y sostiene todas las cosas por la palabra de Su poder. Después de llevar a cabo la purificación de los pecados, el Hijo se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas, (Hebrews 1:3)
Al vencedor, le concederé sentarse conmigo en Mi trono, como yo también vencí y me senté con Mi Padre en Su trono. (Revelation 3:21)
Por tanto, tenía que ser hecho semejante a Sus hermanos en todo, a fin de que llegara a ser un sumo sacerdote misericordioso y fiel en las cosas que a Dios atañen, para hacer propiciación por los pecados del pueblo. (Hebrews 2:17)
puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, quien por el gozo puesto delante de El soportó la cruz, despreciando la vergüenza, y se ha sentado a la diestra del trono de Dios. (Hebrews 12:2)
Bendice, alma mía, al SEÑOR. SEÑOR, Dios mío, cuán grande eres; Te has vestido de esplendor y de majestad, (Psalm 104:1)
Y El se afirmará y pastoreará Su rebaño Con el poder del SEÑOR, Con la majestad del nombre del SEÑOR Su Dios. Y permanecerán, Porque en aquel tiempo El será engrandecido Hasta los confines de la tierra. (Micah 5:4)
Tuya es, oh SEÑOR, la grandeza y el poder y la gloria y la victoria y la majestad, en verdad, todo lo que hay en los cielos y en la tierra; Tuyo es el dominio, oh SEÑOR, y Te exaltas como soberano sobre todo. (1 Chronicles 29:11)
Del norte viene dorado esplendor: Majestad impresionante alrededor de Dios. (Job 37:22)
Pero Cristo, habiendo ofrecido un solo sacrificio por los pecados para siempre, SE SENTO A LA DIESTRA DE DIOS, (Hebrews 10:12)