Por tanto, cuando me propuse esto, ¿acaso obré precipitadamente? O lo que me propongo, ¿me lo propongo conforme a la carne, para que en mí haya al mismo tiempo el sí, sí, y el no, no?
(2 Corinthians 1:17)
Pero como Dios es fiel, nuestra palabra a ustedes no es sí y no.
(2 Corinthians 1:18)
Porque el Hijo de Dios, Cristo Jesús, que fue predicado entre ustedes por nosotros, por mí, Silvano y Timoteo, no fue sí y no, sino que ha sido sí en El.
(2 Corinthians 1:19)
Pues tantas como sean las promesas de Dios, en El todas son sí. Por eso también por medio de El, es nuestro Amén (así sea), para la gloria de Dios por medio de nosotros.
Ahora bien, el que nos confirma con ustedes en Cristo y el que nos ungió, es Dios,
(2 Corinthians 1:21)
quien también nos selló y nos dio el Espíritu en nuestro corazón como garantía.
(2 Corinthians 1:22)
Pero yo invoco a Dios como testigo sobre mi alma, que por consideración a ustedes no he vuelto a Corinto.
(2 Corinthians 1:23)
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Pues Dios, que dijo: "De las tinieblas resplandecerá la luz," es el que ha resplandecido en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en el rostro de Cristo.
(2 Corinthians 4:6)
Porque un Niño nos ha nacido, un Hijo nos ha sido dado, Y la soberanía reposará sobre Sus hombros. Y se llamará Su nombre Admirable Consejero, Dios Poderoso, Padre Eterno, Príncipe de Paz.
(Isaiah 9:6)
Ahora bien, las promesas fueron hechas a Abraham y a su descendencia. No dice: "y a las descendencias," como refiriéndose a muchas, sino más bien a una: "y a tu descendencia," es decir, Cristo (el Mesías).
(Galatians 3:16)
Por tanto, el Señor mismo les dará esta señal: Una virgen concebirá y dará a luz un hijo, y Le pondrá por nombre Emmanuel (Dios con nosotros).
(Isaiah 7:14)
Jesús respondió: "En verdad te digo que el que no nace de agua y del Espíritu no puede entrar en el reino de Dios.
(John 3:5)
Pondré enemistad Entre tú y la mujer, Y entre tu simiente y su simiente; él te herirá en la cabeza, Y tú lo herirás en el talón."
(Genesis 3:15)
Y no nos metas (no nos dejes caer) en tentación, sino líbranos del mal (del maligno). Porque Tuyo es el reino y el poder y la gloria para siempre. Amén.'
(Matthew 6:13)
A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos, se me concedió esta gracia: anunciar a los Gentiles las inescrutables riquezas de Cristo,
(Ephesians 3:8)
Porque todo esto es por amor a ustedes, para que la gracia que se está extendiendo por medio de muchos, haga que las acciones de gracias abunden para la gloria de Dios.
(2 Corinthians 4:15)
Porque el que es bendecido en la tierra, Será bendecido por el Dios de la verdad; Y el que jura en la tierra, Jurará por el Dios de la verdad. Porque han sido olvidadas las angustias primeras, Y porque están ocultas a Mis ojos.
(Isaiah 65:16)
Sea su nombre para siempre; Que su nombre se engrandezca mientras dure el sol, Y sean benditos por él los hombres ; Llámenlo bienaventurado todas las naciones.
(Psalm 72:17)
Porque la paga del pecado es muerte, pero la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.
(Romans 6:23)
En tu simiente serán bendecidas todas las naciones de la tierra, porque tú has obedecido Mi voz."
(Genesis 22:18)
Y el testimonio es éste: que Dios nos ha dado vida eterna, y esta vida está en Su Hijo.
(1 John 5:11)
Porque la Ley fue dada por medio de Moisés; la gracia y la verdad fueron hechas realidad por medio de Jesucristo (Jesús el Mesías).
(John 1:17)
para alabanza de la gloria de Su gracia que gratuitamente ha impartido sobre nosotros en el Amado.
(Ephesians 1:6)
Bendito sea el Señor, Dios de Israel, Porque nos ha visitado y ha traído redención para Su pueblo,
(Luke 1:68)
a fin de que nosotros, que fuimos los primeros en esperar en Cristo (el Mesías), seamos para alabanza de Su gloria.
(Ephesians 1:12)
Jesús le dijo: "Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por Mí.
(John 14:6)
Pero la Escritura lo encerró todo bajo pecado, para que la promesa que es por la fe en Jesucristo fuera dada a todos los que creen.
(Galatians 3:22)
Ustedes son los hijos (descendientes) de los profetas y del pacto que Dios hizo con sus padres, al decir a Abraham: 'Y EN TU SIMIENTE SERAN BENDITAS TODAS LAS FAMILIAS DE LA TIERRA.'
(Acts 3:25)
Gloria a Dios en las alturas, Y en la tierra paz entre los hombres (de buena voluntad) en quienes El se complace."
(Luke 2:14)
Nosotros les anunciamos las buenas nuevas (el evangelio) de que la promesa hecha a los padres,
(Acts 13:32)
a fin de poder mostrar en los siglos venideros las sobreabundantes riquezas de Su gracia por Su bondad para con nosotros en Cristo Jesús.
(Ephesians 2:7)
cuando El venga para ser glorificado en Sus santos en aquel día y para ser admirado entre todos los que han creído; porque nuestro testimonio ha sido creído por ustedes.
(2 Thessalonians 1:10)
A éstos Dios quiso dar a conocer cuáles son las riquezas de la gloria de este misterio entre los Gentiles, que es Cristo en ustedes, la esperanza de la gloria.
(Colossians 1:27)
El cetro no se apartará de Judá, Ni la vara de gobernante de entre sus pies, Hasta que venga Siloh, Y a él sea dada la obediencia de los pueblos.
(Genesis 49:10)
Porque el SEÑOR ha edificado a Sion, Y se ha manifestado en Su gloria.
(Psalm 102:16)
diciendo: "¡Amén! La bendición, la gloria, la sabiduría, la acción de gracias, el honor, el poder y la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén."
(Revelation 7:12)
Por tanto, acéptense los unos a los otros, como también Cristo nos aceptó para la gloria de Dios.
(Romans 15:7)
Todos éstos murieron en fe, sin haber recibido las promesas, pero habiéndolas visto desde lejos y aceptado con gusto, confesando que eran extranjeros y peregrinos (expatriados) sobre la tierra.
(Hebrews 11:13)
Jesucristo es el mismo ayer y hoy y por los siglos.
(Hebrews 13:8)
De otra manera, si bendices sólo en el espíritu, ¿cómo dirá el "Amén" a tu acción de gracias el que ocupa el lugar del que no tiene ese don, puesto que no sabe lo que dices?
(1 Corinthians 14:16)
Escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: 'El Amén, el Testigo fiel y verdadero, el Principio de la creación de Dios, dice esto:
(Revelation 3:14)
a fin de que no sean perezosos, sino imitadores de los que mediante la fe y la paciencia heredan las promesas.
(Hebrews 6:12)
Pero aquél cuya genealogía no viene de ellos, recibió el diezmo de Abraham y bendijo al que tenía las promesas.
(Hebrews 7:6)
En cuanto a ustedes, que permanezca en ustedes lo que oyeron desde el principio. Si en ustedes permanece lo que oyeron desde el principio, ustedes también permanecerán en el Hijo y en el Padre.
(1 John 2:24)
ya que tienen que ver sólo con comidas y bebidas, y diversos lavamientos, ordenanzas para el cuerpo impuestas hasta el tiempo de reformar las cosas .
(Hebrews 9:10)
A ellos les fue revelado que no se servían a sí mismos, sino a ustedes, en estas cosas que ahora les han sido anunciadas mediante los que les predicaron el evangelio (les anunciaron las buenas nuevas) por el Espíritu Santo enviado del cielo; cosas a las cuales los ángeles anhelan mirar.
(1 Peter 1:12)
Y todos éstos, habiendo obtenido aprobación (testimonio) por su fe, no recibieron la promesa,
(Hebrews 11:39)
Porque de El, por El y para El son todas las cosas. A El sea la gloria para siempre. Amén.
(Romans 11:36)