Nueva Biblia Latinoamericana
y acercándose a Jesús, Le decían: "¡Salve, Rey de los Judíos!" Y Le daban bofetadas. (John 19:3)
Pilato salió otra vez, y les dijo: "Miren, Lo traigo fuera, para que sepan que no encuentro ningún delito en El." (John 19:4)
Y cuando Jesús salió fuera, llevaba la corona de espinas y el manto de púrpura. Y Pilato les dijo: "¡Aquí está el Hombre!" (John 19:5)
Cuando Lo vieron los principales sacerdotes y los guardias, gritaron: "¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo!" Pilato les dijo: "Ustedes, pues, Lo toman y Lo crucifican, porque yo no encuentro ningún delito en El."
Los Judíos le respondieron: "Nosotros tenemos una ley, y según esa ley El debe morir, porque pretendió ser el Hijo de Dios." (John 19:7)
Entonces Pilato, cuando oyó estas palabras, se atemorizó aún más. (John 19:8)
Entró de nuevo al Pretorio (residencia oficial del gobernador) y dijo a Jesús: "¿De dónde eres Tú?" Pero Jesús no le dio respuesta. (John 19:9)

Other publications related to "John 19:6":

Brandt Gillespie
Want Truth? Listen to Jesus!
In the account of Jesus interrogation before Pilate, Jesus states that His kingdom is not of this world and that He came to testify to the truth. We must listen to Jesus, who is the eternal truth, in a world filled with competing philosophies and voices claiming truth.


Samuel Caraballo
Surrendering our personal agendas
In this article, the author discusses the importance of surrendering our personal agendas and submitting ourselves entirely to Gods will, using the example of Jesus response to the Pharisees in Matthew 22:15-22.


John 19:6 - Cross Reference

¡Fuera! ¡Fuera! ¡Crucifícalo!" gritaron ellos. "¿He de crucificar a su Rey?" les dijo Pilato. Los principales sacerdotes respondieron: "No tenemos más rey que el César." (John 19:15)
Viendo Pilato que no conseguía nada, sino que más bien se estaba formando un tumulto, tomó agua y se lavó las manos delante de la multitud, diciendo: "Soy inocente de la sangre de este Justo. ¡Allá ustedes!" (Matthew 27:24)
Pues los que habitan en Jerusalén y sus gobernantes, sin reconocer a Jesús ni las palabras (las voces) de los profetas que se leen todos los días de reposo, cumplieron estas escrituras, cuando Lo condenaron. (Acts 13:27)
Entonces Pilato les dijo: "Se Lo pueden llevar y juzgar conforme a su ley." "A nosotros no nos es permitido dar muerte a nadie," le dijeron los Judíos. (John 18:31)
Pilato les dijo: "¿Qué haré entonces con Jesús, llamado el Cristo (Mesías)?" "¡Sea crucificado!" dijeron todos. (Matthew 27:22)
El Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob, el Dios de nuestros padres (antepasados), ha glorificado a Su Siervo Jesús, al que ustedes entregaron y repudiaron en presencia de Pilato, cuando éste había resuelto poner a Jesús en libertad. (Acts 3:13)
Entonces Pilato dijo a los principales sacerdotes y a la multitud: "No encuentro delito en este hombre." (Luke 23:4)
¿A cuál de los profetas no persiguieron sus padres? Ellos mataron a los que antes habían anunciado la venida del Justo, del cual ahora ustedes se hicieron traidores y asesinos; (Acts 7:52)
Pilato les preguntó: "¿Qué haré, entonces, con el que ustedes llaman el Rey de los Judíos?" (Mark 15:12)
Este fue entregado por el plan predeterminado y el previo conocimiento de Dios, y ustedes Lo clavaron en una cruz por manos de impíos y Lo mataron. (Acts 2:23)
Pilato salió otra vez, y les dijo: "Miren, Lo traigo fuera, para que sepan que no encuentro ningún delito en El." (John 19:4)
Pero, vean, la mano del que Me entrega está junto a Mí en la mesa. (Luke 22:21)