Pero el que había sido sanado no sabía quién era, porque Jesús, sin que se dieran cuenta, se había apartado de la multitud que estaba en aquel lugar. (John 5:13)

Después de esto Jesús lo halló en el templo y le dijo: "Mira, has sido sanado; no peques más, para que no te suceda algo peor." (John 5:14)

El hombre se fue, y dijo a los Judíos que Jesús era el que lo había sanado. (John 5:15)

A causa de esto los Judíos perseguían a Jesús, porque hacía estas cosas en el día de reposo.

Pero Jesús les respondió: "Hasta ahora Mi Padre trabaja, y Yo también trabajo." (John 5:17)

Entonces, por esta causa, los Judíos aún más procuraban matar a Jesús, porque no sólo violaba el día de reposo, sino que también llamaba a Dios Su propio Padre, haciéndose igual a Dios. (John 5:18)

Por eso Jesús les decía: "En verdad les digo que el Hijo no puede hacer nada por su cuenta, sino lo que ve hacer al Padre; porque todo lo que hace el Padre, eso también hace el Hijo de igual manera. (John 5:19)

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Jesus, greater than Moses and the Law
In this article, Dr. Roberto Miranda discusses the power of Jesus to heal and restore as demonstrated in the narrative of the paralytic in John 5. He emphasizes the importance of presenting Jesus Christ as the focus of Christianity rather than a religious system or institution, and highlights the superiority of Jesus over the Old Testament system of healing. The article also touches on the doctrine of hell and the invitation to accept Christ for salvation and eternal life.

The requirements of the miracle
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John 5:16 - Cross Reference

Entonces Jesús dijo al hombre: "Extiende tu mano." Y él la extendió, y le fue restaurada, sana como la otra. (Matthew 12:13)

Por eso procuraban otra vez prender a Jesús, pero El se les escapó de entre las manos. (John 10:39)

Pero ellos se llenaron de ira, y discutían entre sí qué podrían hacerle a Jesús. (Luke 6:11)

Al caer a tierra, oyó una voz que le decía: "Saulo, Saulo, ¿por qué Me persigues?" (Acts 9:4)

Entonces algunos de Jerusalén decían: "¿No es Este al que procuran matar? (John 7:25)

Pero el que había sido sanado no sabía quién era, porque Jesús, sin que se dieran cuenta, se había apartado de la multitud que estaba en aquel lugar. (John 5:13)

Pero cuando los Fariseos salieron, enseguida comenzaron a tramar con los Herodianos en contra de Jesús, para ver cómo Lo podrían destruir. (Mark 3:6)

¿No les dio Moisés la Ley, y sin embargo ninguno de ustedes la cumple? ¿Por qué Me quieren matar?" (John 7:19)

Acuérdense de la palabra que Yo les dije: 'Un siervo no es mayor que su señor.' Si Me persiguieron a Mí, también los perseguirán a ustedes; si guardaron Mi palabra, también guardarán la de ustedes. (John 15:20)