Nueva Biblia Latinoamericana
En aquel día el SEÑOR defenderá a los habitantes de Jerusalén, y el débil entre ellos aquel día será como David, y la casa de David será como Dios, como el ángel del SEÑOR delante de ellos. (Zechariah 12:8)
Y sucederá en aquel día que me dispondré a destruir a todas las naciones que vengan contra Jerusalén. (Zechariah 12:9)
Y derramaré sobre la casa de David y sobre los habitantes de Jerusalén, el Espíritu de gracia y de súplica, y Me mirarán a Mí, a quien han traspasado. Y se lamentarán por El, como quien se lamenta por un hijo único, y llorarán por El, como se llora por un primogénito. (Zechariah 12:10)
En aquel día habrá gran lamentación en Jerusalén, como la lamentación de Hadad Rimón en la llanura de Meguido.
Y se lamentará la tierra, cada familia por su lado: la familia de la casa de David por su lado, y sus mujeres por su lado; la familia de la casa de Natán por su lado, y sus mujeres por su lado; (Zechariah 12:12)
la familia de la casa de Leví por su lado, y sus mujeres por su lado; la familia de los Simeítas por su lado, y sus mujeres por su lado; (Zechariah 12:13)
todas las demás familias, cada familia por su lado, y sus mujeres por su lado. (Zechariah 12:14)

Other publications related to "Zechariah 12:11":

Dr. Roberto Miranda
I will not offer a sacrifice that costs me nothing
The article reflects on the importance of sacrifice and integrity in spiritual matters, using the story of David to highlight the consequences of sin and the need to unite matter with spirit. The speaker also emphasizes the significance of the holy land and building where their church is located, calling on their congregation to offer significant sacrifices and offerings to fulfill Gods purpose for their church.


Dr. Roberto Miranda
Zachariah 9:9
The prophet Zechariah speaks of a coming Messiah who will bring salvation and peace to the people of Israel.


Zechariah 12:11 - Cross Reference

Sus siervos lo sacaron del carro y lo llevaron en el segundo carro que él tenía, y lo trajeron a Jerusalén donde murió, y fue sepultado en los sepulcros de sus padres. Y todo Judá y Jerusalén hicieron duelo por Josías. (2 Chronicles 35:24)
En sus días subió Faraón Necao, rey de Egipto, contra el rey de Asiria junto al Río Eufrates. Y el rey Josías fue a su encuentro, pero Faraón Necao lo mató en Meguido en cuanto lo vio. (2 Kings 23:29)