Nueva Biblia Latinoamericana
Pusiste un límite que no pueden cruzar, Para que no vuelvan a cubrir la tierra. (Psalm 104:9)
El hace brotar manantiales en los valles, Corren entre los montes; (Psalm 104:10)
Dan de beber a todas las bestias del campo, Los asnos monteses mitigan su sed. (Psalm 104:11)
Junto a ellos habitan las aves de los cielos, Elevan sus trinos entre las ramas.
El riega los montes desde Sus aposentos, Del fruto de Sus obras se sacia la tierra. (Psalm 104:13)
El hace brotar la hierba para el ganado, Y las plantas para el servicio del hombre, Para que él saque alimento de la tierra, (Psalm 104:14)
Y vino que alegra el corazón del hombre, Para que haga brillar con aceite su rostro, Y alimento que fortalece el corazón del hombre. (Psalm 104:15)

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The sermon discusses the concept of flourishing in the Lord and how to achieve it, emphasizing the need to trust in Gods timing, take from His source of living water, and follow a process of improvement. The message also highlights the importance of patience, diligence, and Gods grace during the waiting period. The speaker encourages listeners to receive Gods blessings and be productive in extending His kingdom through their lives.


Charles Spurgeon
Feed yourself in the rich meadows
Learn how to grow in grace and knowledge of our Lord and Savior through conscious communion with Him in the rich meadows of holy trust.


Psalm 104:12 - Cross Reference

Los árboles del SEÑOR se sacian, Los cedros del Líbano que El plantó, (Psalm 104:16)
Conozco a todas las aves de los montes, Y Mío es todo lo que en el campo se mueve. (Psalm 50:11)
El da su alimento al ganado Y a la cría de los cuervos cuando chillan. (Psalm 147:9)
Las fieras y todo el ganado; Reptiles y aves que vuelan; (Psalm 148:10)
Miren las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros, y sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿No son ustedes de mucho más valor que ellas? (Matthew 6:26)
Aun el gorrión ha hallado casa, Y la golondrina nido para sí donde poner sus polluelos: ¡Tus altares, oh SEÑOR de los ejércitos, Rey mío y Dios mío! (Psalm 84:3)
Jesús le respondió: "Las zorras tienen madrigueras (cuevas) y las aves del cielo nidos, pero el Hijo del Hombre no tiene dónde recostar la cabeza." (Matthew 8:20)