Los Israelitas y los de Judá que habitaban en las ciudades de Judá, trajeron el diezmo de bueyes y ovejas y el diezmo de las cosas sagradas dedicadas al SEÑOR su Dios, y los depositaron en montones.
(2 Chronicles 31:6)
En el mes tercero comenzaron a formar los montones y los terminaron en el mes séptimo.
(2 Chronicles 31:7)
Cuando Ezequías y los jefes vinieron y vieron los montones, bendijeron al SEÑOR y a Su pueblo Israel.
(2 Chronicles 31:8)
Ezequías preguntó a los sacerdotes y a los Levitas acerca de los montones,
y el sumo sacerdote Azarías, de la casa de Sadoc, le dijo: "Desde que se comenzaron a traer las ofrendas a la casa del SEÑOR, hemos tenido bastante para comer y ha sobrado mucho, porque el SEÑOR ha bendecido a Su pueblo. Esta gran cantidad es lo que ha sobrado."
(2 Chronicles 31:10)
Entonces Ezequías ordenó que prepararan cámaras en la casa del SEÑOR, y las prepararon.
(2 Chronicles 31:11)
Fielmente llevaron allí las ofrendas y los diezmos y las cosas consagradas. El Levita Conanías era el intendente encargado de ellas, y su hermano Simei era el segundo.
(2 Chronicles 31:12)
