A Set le nació también un hijo y le puso por nombre Enós. Por ese tiempo comenzaron los hombres a invocar el nombre del SEÑOR.
(Genesis 4:26)Este es el libro de las generaciones de Adán. El día que Dios creó al hombre, a semejanza de Dios lo hizo.
(Genesis 5:1)Varón y hembra los creó. Los bendijo, y los llamó Adán el día en que fueron creados.
(Genesis 5:2)Cuando Adán había vivido 130 años, engendró un hijo a su semejanza, conforme a su imagen, y le puso por nombre Set.
Y los días de Adán después de haber engendrado a Set fueron 800 años, y tuvo otros hijos e hijas.
(Genesis 5:4)El total de los días que Adán vivió fue de 930 años, y murió.
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Entre ellos también todos nosotros en otro tiempo vivíamos en las pasiones de nuestra carne, satisfaciendo los deseos de la carne y de la mente (de los pensamientos), y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás.
(Ephesians 2:3)¿Quién hará algo limpio de lo inmundo? ¡Nadie!
(Job 14:4)¿Qué es el hombre para que sea puro, O el nacido de mujer para que sea justo?
(Job 15:14)Yo nací en iniquidad, Y en pecado me concibió mi madre.
(Psalm 51:5)El SEÑOR ha mirado desde los cielos sobre los hijos de los hombres Para ver si hay alguien que entienda, Alguien que busque a Dios.
(Psalm 14:2)Lo que es nacido de la carne, carne es, y lo que es nacido del Espíritu, espíritu es.
(John 3:6)Por tanto, tal como el pecado entró en el mundo por medio de un hombre, y por medio del pecado la muerte, así también la muerte se extendió a todos los hombres, porque todos pecaron.
(Romans 5:12)El ángel le respondió: "El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Niño que nacerá será llamado Hijo de Dios.
(Luke 1:35)Adán se unió otra vez a su mujer; y ella dio a luz un hijo y le puso por nombre Set, porque, dijo ella: "Dios me ha dado otro hijo en lugar de Abel, pues Caín lo mató."
(Genesis 4:25)No toda carne es la misma carne, sino que una es la de los hombres, otra la de las bestias, otra la de las aves y otra la de los peces.
(1 Corinthians 15:39)¿Cómo puede un hombre, pues, ser justo con Dios? ¿O cómo puede ser limpio el que nace de mujer?
(Job 25:4)