Jesús le contestó: "Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en Mí, aunque muera, vivirá,
(Juan 11:25)
y todo el que vive y cree en Mí, no morirá jamás. ¿Crees esto?"
(Juan 11:26)
Ella Le dijo: "Sí, Señor; yo he creído que Tú eres el Cristo (el Mesías), el Hijo de Dios, o sea, el que viene al mundo."
(Juan 11:27)
Habiendo dicho esto, Marta se fue y llamó a su hermana María, diciéndole en secreto: "El Maestro está aquí, y te llama."
Tan pronto como ella lo oyó, se levantó rápidamente y fue hacia El.
(Juan 11:29)
Porque Jesús aún no había entrado en la aldea, sino que todavía estaba en el lugar donde Marta Lo había encontrado.
(Juan 11:30)
Entonces los Judíos que estaban con ella en la casa consolándola, cuando vieron que María se levantó de prisa y salió, la siguieron, suponiendo que iba al sepulcro a llorar allí.
(Juan 11:31)
Otras publicaciones relacionadas con "Juan 11:28":
Juan 11:28 - Referencia Cruzada
Y El respondió: "Vayan a la ciudad, a cierto hombre , y díganle: 'El Maestro dice: "Mi tiempo está cerca; quiero celebrar la Pascua en tu casa con Mis discípulos."'"
(Mateo 26:18)
¡Una voz! ¡Mi amado! ¡Miren, él viene, Saltando por los montes, Brincando por los collados!
(Cantares 2:8)
Jesús se detuvo y dijo: "Llámenlo." Y llamaron al ciego, diciéndole: "¡Anímate! Levántate, que te llama."
(Marcus 10:49)
Entonces aquel discípulo a quien Jesús amaba, dijo a Pedro: "¡Es el Señor!" Oyendo Simón Pedro que era el Señor, se puso la ropa, porque se la había quitado para poder trabajar, y se echó al mar.
(Juan 21:7)
Entonces nosotros, los que estemos vivos y que permanezcamos, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes al encuentro del Señor en el aire, y así estaremos con el Señor siempre.
(1 Tesalonicenses 4:17)
El encontró primero a su hermano Simón, y le dijo: "Hemos hallado al Mesías" (que traducido quiere decir, Cristo).
(Juan 1:41)
Por tanto, fortalezcan las manos débiles y las rodillas que flaquean,
(Hebreos 12:12)
Aquel día,' declara el SEÑOR de los ejércitos, 'convidarán cada uno a su prójimo bajo su parra y bajo su higuera.'"
(Zacarías 3:10)
A éste le abre el portero, y las ovejas oyen su voz; llama a sus ovejas por nombre y las conduce afuera.
(Juan 10:3)
y donde él entre, digan al dueño de la casa: 'El Maestro dice: "¿Dónde está Mi habitación en la que pueda comer la Pascua con Mis discípulos?"'
(Marcus 14:14)
Y dirán al dueño de la casa: 'El Maestro te dice: "¿Dónde está la habitación, en la cual pueda comer la Pascua con Mis discípulos?"'
(Lucas 22:11)
Felipe encontró a Natanael y le dijo: "Hemos hallado a Aquél de quien escribió Moisés en la Ley, y también los Profetas, a Jesús de Nazaret, el hijo de José."
(Juan 1:45)
¡María!" le dijo Jesús. Ella, volviéndose, Le dijo en Hebreo: "¡Raboní!" (que quiere decir Maestro).
(Juan 20:16)
Ustedes Me llaman Maestro y Señor; y tienen razón, porque Lo soy.
(Juan 13:13)
Por tanto, confórtense (aliéntense) los unos a los otros, y edifíquense el uno al otro, tal como lo están haciendo.
(1 Tesalonicenses 5:11)
Mientras iban ellos de camino, Jesús entró en cierta aldea; y una mujer llamada Marta Lo recibió en su casa.
(Lucas 10:38)
Entonces Marta, cuando oyó que Jesús venía, Lo fue a recibir, pero María se quedó sentada en casa.
(Juan 11:20)