Un corazón que agrade a Dios
Dr. Roberto Miranda(Audio: Español)
RESUMEN:
En esta meditación doble, se habla de la importancia de tener un corazón que agrade a Dios. Se menciona que muchas veces no sabemos lo que hay en nuestro propio corazón y que necesitamos que Dios nos pruebe y nos revele lo que hay en nuestro interior. También se habla de la importancia de discernir las influencias, personas y ambientes a nuestro alrededor para evitar que cosas negativas entren en nuestro corazón. Se mencionan ejemplos como el de Lucifer, que a pesar de ser creado perfecto, en un momento dado reveló orgullo y soberbia y fue expulsado del cielo. Se habla de la importancia de pedirle a Dios que nos examine y saque lo que hay dentro de nosotros. Se menciona el ejemplo del pueblo de Israel, que fue sometido a pruebas y tribulaciones para revelar lo que había en su corazón y para formarlos e instruirlos en ciertas verdades. Finalmente, se menciona el ejemplo de Moisés, que fue formado por Dios durante 80 años antes de ser utilizado como libertador del pueblo de Israel.
En este sermón se habla sobre la importancia de tener un corazón sano y agradable a Dios. Se menciona que Dios trabaja en nuestras vidas para formar nuestro carácter y enseñarnos acerca de la verdad. Se anima a los oyentes a llenar su corazón con la palabra de Dios, a hacer un pacto con la verdad, a entregar su vida a Dios para que Él forme su corazón, a pedir a Dios que examine su corazón y a vigilar las influencias que entran en su corazón. Se enfatiza que el adquirir un corazón bien formado debe ser la prioridad en la vida de una persona.
Es importante que protejas tu corazón de influencias negativas como lecturas, entretenimientos, personas y la iglesia que escoges. Debes tener un guardián en la puerta de tu corazón y preguntarte si lo que permites entrar está a favor de Dios y contribuye a tu vida espiritual. Si no es así, debes cortarlo.Iniciamos en una forma casi inesperada un tema el domingo pasado acerca del corazón, y Dios le fué dando una forma un poquito diferente según yo lo iba tratando aquí desde el púlpito, pero hemos estado meditando acerca de la importancia de un corazón que agrade a Dios, yo diría que ese podría ser el título de esta meditación doble no, un corazón que agrade a Dios, eso es lo que nosotros deseamos para nuestra vida, eso es ciertamente lo que yo deseo, que sea agradable a mi Padre celestial. Un corazón que cuando Él lo mire Él pueda ver algo que le traiga una sonrisa, y la meta de nuestra vida debe ser ésa.
Muchas veces nosotros ni siquiera sabemos lo que hay en nuestro propio corazón, uno no sabe qué hay en el corazón de una persona como yo decía aún gente que han estado muy cerca de nosotros, y por eso necesitamos que Dios como decíamos nos pruebe, a las personas, las influencias que tenemos a nuestro alrededor, los lugares a los cuáles nosotros vamos a someternos, nuestras escuelas, nuestra universidad, un seminario, una relación a largo plazo, un ambiente donde nos encontremos, una ciudad donde vamos a vivir, una cultura inclusive, tenemos que tener cuidado de discernir las cosas que están entrando a nuestra vida, porque estas cosas van a entrar en nuestro corazón.